El Z8 fue un roadster de gama alta producido artesanalmente en serie por BMW entre 1999 y 2003 sobre un concepto anterior de 1997, denominado como Z07 (el cual habría causado gran sensación en el Salón de Tokio de ese año, y a su vez estaba inspirado en el BMW 507 de 1956). Aunque el equipo de diseño fue liderado por Chris Bangle, el exterior fue obra de Henrik Fisker y el interior por Michael Ninic quienes lograron una excelente conjunción de líneas clásicas con otras modernas... aunque solamente 5.703 personas pudieran meter esta obra de arte intemporal en sus garajes.
En su momento, este coche de casi 130.000 dólares se caracterizaba por su chásis de aluminio y su motor V8 de cinco litros con 32 válvulas construido por BMW Motorsport, que desarrollaba unos 400 CVs. Con esas cifras el vehículo alcanzaba los 100 KM/h en solamente 4,7 segundos y aunque su velocidad estaba limitada a 250 KM/h podía alcanzar bastante más. Era tan bueno que batía al Ferrari 360 Modena en manejo, aceleración y frenada (según la revista Car & Driver), y BMW confiaba tanto en su producto que prometió que habría piezas almacenadas para él en los próximos 50 años (realmente tenían mucha fe en que este coche se iba a convertir en un clásico instantáneo!).
Aunque este roadster tenía de serie la capota de lona, Alpina (ya en el último año de su producción) renovó el coche añadiéndole un techo rígido y le hizo algunos cambios concernientes a la caja de cambios, sustituyendo la manual de seis velocidades que tenía de serie por una automática BMW Steptronic de cinco relaciones. También sustituyó el motor por otro más "tranquilo" de 4.8 litros que ahora proporcionaba 375 CVs pero ahora (curiosamente) el coche corría más que su antecesor pues el límte de velocidad se alzó hasta los 260 KM/h... claramente la maniobra iba destinada a contentar a los usuarios americanos. De todas formas esta serie fue minoritaria y solo se construyeron 555 ejemplares, aunque algunos se quedaron en el Reino Unido.
Para terminar no hay que obviar que fue un automóvil bastante mediático, con apariciones en películas y videojuegos del famoso agente secreto James Bond, un film de Jackie Chan y algunas series y videoclips americanos.
Hace no mucho tiempo presenté una buena miniatura de SCHUCO sobre el BMW 507 y realmente se nota la inspiración que tuvieron en BMW al ponerlos juntos. Aunque este IXO de caja negra es de calidad inferior no se puede dejar pasar por alto su buen molde y el interior tan trabajado que tiene, aunque con algún fallito de calidad que solo se hace evidente al verlo muy de cerca. El pintado tampoco desmerece así como el buen trabajo que hicieron con los detalles externos, pero si queremos una buena alternativa más económica Altaya lo sacó al mercado en su colección de kiosko "Coches de Ensueño" hace ya algunos años.
Quizás de cerca se noten fallos a los que hacés referencia, pero en las fotos no se ven para nada, se asemeja mucho a un trabajo premium. Para mí es un diseño hermoso y una miniatura sobresaliente.
ResponderEliminarSaludos!
El fallo más bien me refiero al salpicadero, pero quizás sea debido a un maltrato y no a un defecto de fábrica. De todas formas yo lo compré nuevo sin abrir a una tienda de Ebay.
ResponderEliminarLa miniatura es muy buena, cierto es que puede ser premium. Los IXO pata negra es lo que tienen!
saludos!! espero poder ya postear cada dos días como antes (ahora ya vuelvo a tener internet en casa).
Una buena pieza y que en las fotos apenas se le nota ese fallo, quizás en mano se le ve mas, no obstante es una muy buena pieza y con un color que le sienta como anillo al dedo.
ResponderEliminarUn saludo y encantado de verte de nuevo por aquí.
=))
No, en la mano se ve menos aún, salvo que tengas una vista de lince. Yo no me hubiese dado cuenta si no es por el "macro" de la cámara.
EliminarSaludos, aunque dentro de poco espero volver a trabajar y no sé si podré postear tan a menudo (aunque algo "caerá").
me sorprendió el comentario de los repuestos para 50 años,
ResponderEliminarera de esperar que el auto fuera un clásico instantáneo,
aunque me parece que el título de clásico instantáneo es difícil de conseguir,hasta para bmw.
el modelo se ve bien, un molde simple con una trompa resultona y el acento en el magnífico interior, como era de esperarse.
Me imagino que fue más una maniobra de márketing que otra cosa. Además la tirada fue corta, no llegó a seis mil ejemplares para tantos años pero es cierto que el coche se hacía a mano en Munich.
EliminarEs un modelo que me sorprendió, en la mano te aseguro que gana mucho más. Hasta las proporciones son muy correctas.
No conocía este BMW (al igual que el 507), o si lo conocía, era una versión diferente (¿había otras variantes de este auto?).
ResponderEliminarHermoso, y la miniatura le hace honores.
Abrazos!
Juan, Z8 solo hubo uno (si te refieres al tipo de carrocería).
EliminarSí existió con diversos colores (algunos en bicolor) y llantas, y se le desarrolló un techo rígido por parte de Alpina (como dije en el post).
Está claro que el Z8 es un hijo "espiritual" del 507, tal y como expresaron sus diseñadores. Tuve la suerte de ver en carretera una sola vez en mi vida este coche y es una preciosidad, pero su precio era muy alto (unos 100.000 euros de entonces).
Saludos & abrazos
Bonita miniatura, con la combinación ideal de gris con interior rojo, muy buena factura, parece un Minichamps.
ResponderEliminarSaludos
El Minichamps es bicolor y no queda mal, pero no me convence aunque no cuesta mucho más que este IXO de caja negra.
EliminarSiempre he visualizado este coche tal y como lo compré, en color plata. Le sienta ese color como un guante, aparte de que la carrocería sea de aluminio.
Saludos