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lunes, 6 de abril de 2015
Austin-Healey Sprite MkI de IXO/Altaya
Pertenece a la colección española "Nuestros queridos coches de antaño" de la editorial Altaya.
El pequeño deportivo Sprite ("duende") fue presentado a la prensa en Montecarlo por la BMC (British Motor Corporation) en 1958, con el espíritu de ser un vehículo divertido y barato para el aficionado. El desarrollo corrió a cargo de la compañía de Donald Healey y utilizaba muchos componentes de varios vehículos, aunque el motor era un Austin Serie A convenientemente modificado (como el que montaba el Morris Minor). Fue fabricado en el Reino Unido y Australia en un número de casi 130.000 unidades contando todas sus generaciones, perteneciendo a la primera serie unas 50.000.
El MkI "ojos de rana" (así apodado en el Reino Unido, para EE.UU fue el "ojos de bicho") estaba diseñado por Gerry Coker con el objeto de llevar faros retráctiles, pero en BMC desecharon la idea y el coche acabó teniendo ese simpático aspecto gracias a sus faros fijos (recuerda bastante al Crosley Super Sport de 1951). Este vehículo era más revolucionario de lo que parecía ya que fue el primero producido en masa que contó con un chásis solidario con los paneles de la carrocería aunque no era monocasco propiamente dicho. En esa carrocería no existían ni puertas ni maletero accesible por el exterior, y dentro llevaba un viejo conocido de la BMC: un bloque de cuatro cilindros en línea con 948 cm3 y 43 CVs de potencia "vitaminado" por un par de carburadores SU. Este vehículo fue probado por la revista inglesa "The Motor" logrando alcanzar con él los 133 Km/h y obteniendo una aceleración de 0 a 60 millas por hora en unos 20 segundos.
El departamento de competición de la BMC puso sus ojos en el Sprite y lo inscribió en numerosos rallyes y carreras internacionales, llegando a liderar su clase en el Alpine Rallye (Austria) celebrado en 1958. Pero quienes le dieron vida fueron la gran cantidad de pilotos privados y aficionados que lo escogieron como su base para aprender y disfrutar su sencillez y practicidad, siendo un temible rival de coches mucho más modernos (eso después de haber transcurrido más de cincuenta años desde que entró en producción!).
Ya no van quedando muchos ejemplares de la gloriosa colección de los vehículos de antaño de Altaya, por lo que cuando llega alguno al Garaje es tratado con el respeto y la veneración que merece. En esta ocasión le toca el turno a un cochecito que siempre me resultó simpático y muy en consonancia con el espíritu "racing" que algunos llevamos dentro y que los ingleses supieron explotar muy bien hace varias décadas (los herederos serían los actuales Lotus, aunque en comparación mucho más caros). La miniatura se muestra con un molde preciso, no demasiado sobrado de pintura y con un interior muy aceptable aunque externamente no haya demasiado que contar. Sí me gustaron más las llantas de chapa y los cromados, así como el parabrisas y la rejilla frontal. Este cochecito está bastante cotizado y no se deja ver mucho, pero todavía es posible encontrarlo en los canales habituales siendo vendido por gente que no parece saber lo que tiene en mano (lo mismo que ocurre con otros ejemplares de la serie). Os dejo con las fotos y os presento al "ojos de rana", con una mirada entre divertida y pícara...
¡ Se está matando de risa ! Evidentemente es un duende alegre .La parrilla está muy buena , y también esas luces de stop/posición/giro aplicadas , y el interior con todo representado , para no tener que imaginarlo . Me gusta.
ResponderEliminarUn abrazo !
PD : como la entrada se disparó antes de tiempo , ahora Blogger no nos está avisando el cambio y sigue mostrando la del Peugeot 604 . Por ahí , no estaría mal que cuando visites otros blogs , avises del cambio , así todos se enteran . . .
Jajaja pues sí, tiene un "rostro" muy simpático!
EliminarEn cuanto a la entrada no sé bien qué pudo suceder. La cosa es que no puedo corregir el problema desde mi móvil. Cuando vuelva a casa lo miraré.
Abrazos y muchas gracias por señalarme la incidencia.
Está muy lograda la miniatura, hacía rato que no veía uno, tengo por ahí en la vitrina la versión de Detail Cars de hace unos quince años largos, que aún hoy sigue vigente como entonces.
ResponderEliminarAl tuyo solo le veo un detalle, los faros parecen apuntar al cielo, esto se nota sobre todo en la primera y en la última foto, comparándolo enseguida con el real.
Saludos!
Yo no he visto demasiado este coche en miniaura, y creo que es un gran clásico. Me gustaría verlo con mayor calidad!
EliminarLo de los "ojos" es cierto, pero le otorgan mayor simpatía al cochecito. De todas formas valoro sobre todo la fidelidad.
Saludos!
Es tan simpático con sus ojos y sonrisa, que hasta me recuerda a los autos de Cars. Una belleza, típica de los deportivos ingleses de los años cincuenta.
ResponderEliminarLa miniatura le hace honores, y más en color blanco.
Espero que pronto te actualicen tus entradas, así muchos pueden disfrutar estos bellos autitos.
Abrazos!
Juan, creo que algo hice mal programando esta entrada hace un tiempo. No estoy en casa y no lo puedo remediar desde mi móvil, espero no meter más la patita...
EliminarGracioso el enano!
Abrazos
¡El más bonito de los chiquitines! Claro que sí. Una muestra del amor a los coches de los británicos, que no solo de grandes potencias, prestaciones siderales y lujo por doquier, vive la afición. También hay espacio para la sencillez, la originalidad y otro espíritu deportivo que derivan en la simpatía que despierta este coche, para mí uno de los más gozosos que has presentado.
ResponderEliminarHay que buscarlo ya, con número o sin él. Mejor los dos.
Saludos.
Conectamos bien con su espíritu, verdad? Un pequeño vehículo divertido y ratonero, que admite buenas preparaciones y exige "manos" para exprimirlo.
EliminarLos ingleses sí que saben, verdad?
Seguiremos buscando más. Saludos!
Hola Antonio! Soy Josep, de Salou. Miniatura que compartimos y a la que tengo especial cariño. Coincido contigo en que aquella colección fue fantástica. Para mi significó un antes y un después en el mundo del coleccionismo de coches en miniatura. En su momento conseguí pocos ejemplares y con los años los voy reuniendo poco a poco.
ResponderEliminarUn abrazo!
Hola de nuevo Josep, yo también estoy buscando los pocos que me faltan y con paciencia seguro que lo conseguiremos! Merecen la pena.
ResponderEliminarSaludos y un abrazo!