lunes, 12 de diciembre de 2022

Pegaso J4 MkIII 1100 "Carbones Mateo" de IXO/Salvat

 

Pertenece a la colección de "Vehículos de Reparto y Servicio" de la editorial Salvat España.

Heredera del modelo SAVA J4, la furgoneta Pegaso J4 supuso una apuesta segura hasta 1989 para los profesionales españoles del reparto urbano. El modelo procedía de las robustas BMC J4 comercializadas con las marcas Morris y Austin en el Reino Unido y la Commonwealth en versiones de gasolina y diesel, siendo esta última la única motorización disponible para el mercado ibérico.

Las primeras unidades de la SAVA Austin J4 aparecieron en 1965 siendo fabricadas en Valladolid y logrando un éxito casi instantáneo sobre todo por su bajo precio, sin embargo esto no bastó para que SAVA acabase en manos de ENASA en 1966. La propietaria de la marca Pegaso haría evolucionar el modelo aportando mayor potencia, suavidad y una capacidad de carga superior a la tonelada.

La variante que hoy mostramos apareció en el mercado en 1979 con el nombre de J4 1100, siendo la primera serie que portó el nombre de Pegaso en la calandra. El modelo ahora llevaba ventanas laterales posteriores más grandes y un cuadro de mandos más completo, casi más propio de un turismo que de un vehículo comercial. También supuso la importante novedad del arranque mediante llave de contacto (hasta entonces para detener el motor se tiraba de un cable que pasaba corriente a la bomba de inyección) y los limpiaparabrisas pasaron a colocarse en la parte inferior de la luna; por otro lado y opcionalmente apareció una versión "Combi" con un juego de colores más vistoso.

Para 1982 se ofertó la caja de cambios con cinco velocidades de serie y posteriormente se añadieron los frenos de disco delanteros, no existiendo cambios mayores (salvo algunos estéticos en 1986) hasta la desaparición de la serie en 1989. Durante la vida comercial del modelo se había ofrecido con  un bloque a gasóleo de litro y medio de cubicaje y potencia de 50 CVs, siendo mucho más rica su oferta de carrocerías comprendiendo variantes cerradas para carga y pasajeros, "pickup", capitoné o plataforma.















Una variante "pickup" fue la escogida por la empresa zamorana Carbones Mateo para su distribución de leña y otros combustibles sólidos, tarea que realiza desde 1966. Sin embargo el modelo real es de 1984 y se encuentra perfectamente restaurado y en funcionamiento; yo añado que Salvat no pudo hacer una elección mejor a la hora de producirlo por la combinación tan bonita de colores que lleva y la cantidad de detalles (como las varillas de referencia) que contiene. El modelo me enamoró desde el principio por que se nota el mimo con el que trabajaron la réplica, a tal punto que me parece increíble que solamente valiese unos quince euros. También me cuesta mucho ser objetivo con esta pequeña joyita del diecast por su presencia impecable y una calidad a toda prueba; pocos se podrán quejar por la gran cantidad de piezas independientes insertadas, el interior de la cabina, esas ruedas fantásticas y la realización de la caja de carga. Esto es así a tal punto que ni las fotos pudieron hacerle justicia, en mano es otro mundo y resulta una compra imprescindible si le perdonamos cosas tan nimias como el tamaño de los limpiaparabrisas o la ausencia del farito trasero del techo.


















8 comentarios:

  1. Comparando las fotos con el modelo real, resulta increíble que haya salido tan igual, sobre todo considerando que hay tanto detalle y detallito que copiar.
    Ruedas, tampografías, insertos, detalles de la caja, hasta los pinchos negros quedan bien!
    Como bien dices, una joyita!

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    1. Eso es, algo para quedarse mirando un ratito...
      Es de mis modelos preferidos de toda la colección de los vehículos de reparto, por lo bien que luce y además para mí es muy original, pues nunca vi una J4 pickup...

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  2. la verdad que los últimos modelos son una delicia de kiosqueros, y, solamente, serían mejorables con fotograbados u otros elementos "suntuosos" que, difícilmente, podrían ser absorbidos en un precio contenido. Tal cual mencionás, son pocos los pecados a perdonarle.
    Un abrazo
    Luis

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    1. Suma y sigue!
      Según Luca Paretti, de Editorial Salvat, los fotograbados no son nada caros de por sí, lo malo es que exigen tiempo y habilidad para situarlos bien. Por eso no se suelen usar, encarecen mucho el proceso.

      Yo si te digo la verdad no los echo tanto de menos en muchos modelos, una buena tampografía no queda demasiado mal. Siempre hablando de modelos de kiosko. A un premium está claro que sí se lo demando.

      Abrazos!

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    2. Es correcto el comentario de los fotograbados. Tiempo y esfuerzo (guiño para Luis).
      Y agregaría el control de calidad necesario y un mayor riesgo de piezas mal colocadas. Si hoy, a veces pegan torcido un espejo o un limpiaparabrisas de plástico, cuando sea un picaporte o una letra de metal de medio milímetro, puede pasar cualquier cosa!

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    3. Exacto, con las tiradas tan bestiales que se hacen de las miniaturas de kiosko es inviable entretenerse tanto en poner los fotograbados.

      Lo bueno es que venden kits de fotograbados para mejorar modelos!

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  3. Gracias por aclararme el tema de las Sava/Pegaso, porque ya sabia el modelo era básicamente el mismo, pero me chocaba que la había visto con dos marcas diferentes.
    Sin duda otro de los iconos currelas que contribuyo a levantar el país.
    Saludos!!

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    1. Seguramente y por temas de prestigio no quisieron desvincular la marca SAVA, hasta que ya consideraron lo contrario. También es cierto que el modelo final no se parecía mucho al de inicio.

      Saludos!

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