Pertenece a la colección de kiosko "Microcoches de Antaño" de la editorial Altaya España.
El SIMCA 5 fue un automóvil francés, producido bajo licencia FIAT, correspondiente al modelo 500 Topolino A de la firma italiana. Comercializado entre 1936 y 1949, el "Cinq" se fabricó en Nanterre en una cantidad cercana a las 50.000 unidades con carrocerías de tipo coupé biplaza, furgoneta y descapotable, siendo sustituido por el modelo 6.
La versión francesa se había presentado tres meses antes de la italiana con el fin de ser vendido entre las clases populares a un precio inferior de diez mil francos. Para ello se inició su producción en la primera fábrica SIMCA-FIAT establecida en Francia, concretamente en Nanterre (periferia de París). El 5 tenía suspensión delantera independiente, caja manual de cambios de cuatro relaciones, frenos hidráulicos de tambor y sistema eléctrico de 12 V, por lo que se podía decir que no estaba mal equipado.
En cuanto a su mecánica, incorporaba un motor de cuatro cilindros en línea a gasolina con 572 cm3 que rendía aproximadamente doce caballos. Debido a su ligero peso de menos de 600 kilogramos, el Cinq alcanzaba los 90 Km/h con un consumo ajustado de 3,1 litros a los cien: esto constituyó un récord en su época y para corroborarlo se organizó una prueba con recorrido entre París y Madrid ida y vuelta al que se añadió una visita al circuito de Monthléry, lugar en el que cubrió 105 km en una hora.
La serie Cinq contó con los niveles de equipamiento Luxe, Grand Luxe y Découvrable, pero también estuvo disponible temporalmente una versión económica "Standard" que no incluyó paragolpes ni rueda de repuesto. La Segunda Guerra Mundial interrumpió su fabricación, que no sería retomada hasta en 1946 con la venta inicialmente del modelo comercial. El único cambio notable fue la inclusión de las luces de posición en las aletas delanteras por obligación del nuevo reglamento francés de circulación.
Igualmente, el 5 tuvo una vertiente deportiva preparada por Gordini que llegó a participar en las 24 Horas de Le Mans durante 1937, 1938 y 1939, llevándose la primera plaza de la clasificación en la categoría de motores de menos de 750 cm3; este modelo llevaba una carrocería de tipo barqueta con un peso reducido de 450 kilogramos y un motor potenciado hasta los 23 CVs.
Seguimos con los "microcoches" que no fueron microcoches, pero con la felicidad de contar con unos modelitos tan finos y bien replicados como este precioso Cinq de SIMCA anterior a la guerra. La miniatura cuenta con un molde excelente a base de partes encastradas (lo que me resultó no demasiado habitual) pintado con una tonalidad muy bien escogida, clásica de época y que resalta el color beige de la capota de lona. También tenemos un buen interior aunque no se pudo apreciar correctamente en las fotos, con paneles de puerta a juego con la "tapicería" y tablero de mandos. Por fuera tenemos unas buenas ruedas, un frontal decente (lástima de los "pinchitos") y el detalle de las matrículas. Próximamente veremos también, y de la misma colección, a su sucesor el modelo Six con el mismo estilo e idéntico buen hacer, siendo ambos modelos muy recomendables.
Me sorprende la versión económica que no traía paragolpes, pobrecito el autito, tan indefenso!!!!! Sería interesante investigar qué porcentaje de estos autos se conserva.
ResponderEliminarPero más me sorprende que corrieran en LeMans, aunque hubiera toda una categoría para los menores de 750 cc. No me imagino el peligro que representaban estos autitos arrastrándose cuando venían los otros bólidos a velocidad máxima.
Tengo un modelo similar de Brumm (misma versión pero con capota enrollada) y la verdad es que me cuesta encontrar diferencias.
Es obvio que todos los 500 son iguales, es de esperar que los modelos sean similares.
El tuyo se ve muy bien parado, destaca la calandra, quizás más linda que la de Brumm.
Aparato simpático y polivalente el Toppolino, tanto con su original nombre italiano como en sus iteraciones externas (creo que fué diseño de Giacosa pero no estoy seguro). Al igual que el Gaucho, sobre un auto sencillo, esa versión "base", sin paragolpes ni auxilio, sería el monumento a lo espartano (me viene a la mente el Renault 3, en ese caso con poco éxito)
ResponderEliminarProlija la miniatura, pareciera bien concebida y con pocas fallas, de esas que decoran bien, aportando calidad, buen color, formas adecuadas y lindos detalles
Un gran abrazo
Luis