Ford Fiesta MkIV de Minichamps (Edición Dealer)

La cuarta generación del popular Fiesta fue lanzada en 1995 utilizando la plataforma de la serie anterior aunque casi todos sus componentes eran nuevos y se mejoró mucho la suspensión, convirtiéndolo en un coche realmente muy manejable. Fue producido en España, Reino Unido, Alemania, Brasil y Sudáfrica. Era virtualmente el mismo modelo que el japonés Mazda 121 que también se llegó a vender en Europa pero en un número realmente escaso. Este modelo compartía la misma línea de producción pero a pesar de ello el Mazda era significativamente más fiable.

Para este Fiesta estuvieron disponibles los nuevos motores ZETEC de gasolina 1.2 y 1.4 además de los veteranos Endura. También hubo un diesel 1.8 y para algunos mercados sudamericanos se vendió con motor a gasolina con un litro de cubicaje. Encuanto a su carrocería, se pudo adquirir en versión "hatchback" de tres y cinco puertas, con cajas de cambio manuales de 5 velocidades y CVT automática. Si alguien quería una versión coupé podía escoger el Puma, un modelo externamente muy diferente pero que se basaba en la misma plataforma del Mark IV. No obstante, para algunos mercados locales existió una versión sedán tricuerpo denominada Ikon.

El modelo fue el más vendido en Inglaterra entre 1996 y 1998 de su clase y en 1999 sufrió un restyling que afectó sobre todo al frontal y trasera, aunque se incluyeron airbags como dotación de serie y nuevos motores. La serie finalizó en Europa en el año 2002 aunque para Sudamérica la fecha de su retirada no fue hasta 2006 (Fiesta Street),


















La miniatura de Minichamps es un tanto decepcionante, con un tono de pintura realmente horrible y unos interiores un tanto tristes. Esta serie del Fiesta creo que fue la menos agraciada estéticamente, al menos antes del primer restyling (los cambios le sentaron bien) pues esas redondeces no gustaron demasiado al público en general. La aplicación de la pintura es correcta, hay pocos detalles externos que merezcan algún comentario positivo y el frontal lo encontramos un tanto deformado. Al menos cuenta con un techo solar y la trasera es correcta, sin más, pero la única razón por lo que la adquirí fue para seguir completando la serie del Fiesta. Lo bueno es que al ser un "Dealer" de concesionario se puede comprar a un precio muy asequible.

Volkswagen Eos V6 de NOREV

Según la mitología griega, Eos era el nombre de la diosa del viento del alba... un nombre muy adecuado para un coche pensado para disfrutar del viento al aire libre, en la madrugada y a cualquier hora. Partiendo de la base de un "concept" presentado en Ginebra en 2004 con el nombre de "Concept C", el Eos entró en producción en Palmela (Portugal) en el año siguiente con la base del Passat de quinta generación y con el objetivo de sustituir al Golf cabrio y presentar batalla en el exitoso segmento de los coupés descapotables de techo rígido y cuatro plazas (muy poblado con representantes de Renault, Peugeot, Ford y Opel entre otros).

A diferencia del Golf cabrio, el Eos no incorpora una capota de lona (ya totalmente casi en desuso actualmente en este tipo de vehículos) si no un techo eléctrico de vidrio y metal con cinco partes abatible de gran complejidad, que desde el primer momento dio problemas de estanqueidad (que aún siguen). Este techo fue diseñado por una filial de Webasto (Alemania) y tarda unos 25 segundos en plegarse, alojándose en el maletero y robándole bastante capacidad útil. Mecánicamente, y como suele ser habitual en el Grupo VAG, la elección de motores es bastante amplia disponiendo de bloques movidos por gasolina (con cuatro y seis cilindros) siendo el tope un V6 de 3,2 litros con 250 CVs. También existe un diesel de dos litros con 140 o 170 CVs para los que buscaban mayor economía de uso. En cajas de cambio dispone de la clásica manual de seis velocidades y la excelente DSG automática de doble embrague, opcional en los modelos altos de gama.

Actualmente, y desde el 2010 el modelo sufrió un restyling que sobre todo afectó a su parte delantera, haciéndolo más agresivo. Es un modelo no demasiado difundido fuera de Europa, pero cuenta con versión con volante a la derecha y se puede adquirir en mercados tan lejanos como el japonés, australiano o sudafricano. Hubo rumores de introducir en el mercado una versión "R" de muy altas prestaciones, con un motor VR6 y tracción total pero hasta el día de hoy parece que en Volkswagen se contentan con mantener únicamente la versión V6 para aquel que busque "emociones fuertes".
























Por lo que respecta a la miniatura de NOREV, podría pasar sin duda por ser de manufactura AutoArt o Minichamps pues cuenta con un nivel de calidad realmente muy alto. Aunque externamente es bastante buena, el interior en este caso es lo que llama más la atención con esa multitud de detalles y la convincente imitación de la piel en los asientos. La miniatura cuenta con su techo extraible y una pequeña base para cuando está quitado (que no fotografíé), unos buenos bajos y una presentación en caja realmente buena. Este es otro modelo de NOREV para tener en cuenta si nos agrada y además con el aliciente de poder ser encontrado a precios muy ventajosos.

Citroën Berlingo I de Universal Hobbies

Julio de 1996 vio aparecer el binomio de comerciales ligeros Berlingo/Partner (Grupo PSA) para reemplazar a los ya obsoletos modelos con caja detrás y cabina de turismo que inundaban las calles de Europa, modelos como el Renault Express, Seat Trans o Citroën C15 que gozaban de gran robustez y economía de uso pero que se quedaban cortas si se querían utilizar en aspectos más lúdicos o incluso servir como coche mixto principal de una familia.

En Francia, ese concepto se denomina "Ludospace": un vehículo que puede utilizarse en un sinfín de tareas: comercial en el trabajo, gran vehículo de transporte vacacional para toda la familia y sus enseres, como compañero de aficiones o deportes que requieren transportar equipos más o menos pesados o simplemente como un turismo para el día a día. Aunque Citroën y Peugeot fueron los primeros en explotar ese mercado, rápidamente otros constructores se "pusieron las pilas" y así Renault al poco tiempo concibió su Kangoo (con la ventaja de tener una puerta deslizante lateral) y el resto de fabricantes europeos los siguieron posteriormente, aunque no todos.

El Berlingo se ensambló no solamente en Europa (plantas en Francia, España, Portugal y Turquía) si no que dio el salto y también fue fabricada en Argentina en la planta de Buenos Aires. En Europa se podía elegir con motores de cuatro cilindros en línea alimentados por gasolina o gasóleo, existiendo para los primeros bloques de 1.4, 1.6 y 1.8 (con 110 CVs de potencia máxima) y en diesel un 1.9 atmosférico de 71 CVs y los famosos HDi con una potencia máxima de 90 CVs. El chasis del Berlingo derivaba del utilizado en el ZX, por lo que heredaba una buena estabilidad en ruta y la suspensión trasera era la misma que la del Peugeot 405 Break, que hacía al vehículo no perder su aplomo cuando estaba realmente cargado. En cuanto a la caja de cambios, siempre manual con cinco velocidades..

En cuanto a las carrocerías, según el uso al que estuviera destinado el Berlingo se podían elegir con caja cerrada no acristalada con dos plazas o la versión más polivalente con caja acristalada y cinco o siete plazas. Al principio no se podía adquirir con puerta lateral corrediza pero visto el éxito del Kangoo en el Grupo PSA se lo pensaron mejor y añadieron una puerta en el lado derecho (por razones de seguridad) y posteriormente en cada lado. El equipamiento era el mismo prácticamente que el de cualquier turismo de la época y no faltaba el ABS, volante regulable en altura, llantas de chapa, airbag y cristales tintados, siendo  posible pedirlo con reproductor de CDs, aire acondicionado y/o pintura metalizada.

El modelo siempre se vio como más "serio" que su rival el Kangoo, pero tuvo la ventaja de ser el primero en aparecer para cubrir un nuevo nicho de mercado (o más bien crearlo?) y hasta 2010 se llevaban vendidos (entre sus dos generaciones) sobre 1.200.000 vehículos. Este nuevo concepto de vehículo supo seducir a la clientela gracias a su espacioso interior, comodidad y muchos apreciaron también el hecho de viajar en una posición más elevada y la modularidad del Berlingo, pudiéndose escoger puertas dobles y portón de apertura vertical (práctico para los días de lluvia) y además en opción el famoso "Modutop": compartimentos elevados al estilo de los aviones de línea con sus salidas correspondientes de aire y el carrito de plástico plegable "Modubox". De todas formas, estos vehículos han caído casi en desuso por la feroz competencia hecha en nuestros días por los monovolúmenes y los famosos SUV, de aspecto más alejado al del vehículo comercial.


























En cuanto a la revisión del modelito de UH, realmente esta marca se posiciona como un fiel fabricante de réplicas francesas con muy buena calidad. No puedo afirmarlo, pero este modelo del Berlingo creo que pertenece a una colección gala de kiosko sobre Citroën que incluye miniaturas muy apetecibles y que merecen la pena por su calidad y buen precio, aunque con el tiempo cada vez más cuesta dar con ellas. Aprecio la finura del molde, su pintado y el detallado externo aunque haya algún fallito de calidad de montaje. El interior es correcto sin más, pero el conjunto es bastante bueno y, sobre todo, muy fiel.

Ford Taunus P3 Cabrio de Solido

1960 vio nacer en la factoría Ford de Colonia (Alemania) el tercer proyecto de automóvil construído tras la devastadora Segunda Guerra Mundial, al que denominaron muy propiamente como "Projekt 3". Uwe Bahnsen fue quien diseñó bajo la premisa "línea racional" (tal y como se publicitó)... pero a la que la gente común y corriente, menos alambicada, terminó por llamar "bañera"... La presentación al público tuvo lugar en Bonn, con la presencia de personalidades tales como Adenauer y Henry Ford (nieto del fundador de la marca), y ya de paso celebraron el treinta aniversario de la presencia de Ford en Alemania.


Lo cierto es que el nuevo Taunus no abundaba en cromados (tal y como ocurría con su predecesor) acercándose más al estilo europeo, más limpio y simple pero no menos elegante. Hasta 1964 (año del final de la serie P3) el comprador podía optar entre tres motores de gasolina (un 1.5, 1.7 y 1.8 todos con cuatro cilindros en línea y un máximo de 75 CVs), elegir entre caja de cambios manual y automática "Saxomat" de tres velocidades y "vestir" su coche con una amplia variedad de colores y terminaciones tanto en el exterior como en el interior.


Ford consiguió colocar en el mercado unos 670.000 ejemplares casi  todos en versión berlina (con tres y cuatro puertas) y muchas menos de la versión familiar "Kombi", quedando casi como puramente testimoniales las versiones cabrio y coupé (unas 150 unidades, obra de Karl Deutsch) resultando ser bastante caros. No solamente se vieron P3 en Alemania, si no que llegaron a exportarse en cantidades significativas a Grecia y Sudáfrica, aunque en estos mercados llegaron a convertirlas en pickup (!). Hoy en día no llegan a 500 los ejemplares que siguen en condiciones de circular en todo el mundo, censándose solamente unos 10 de ellos en los EE.UU.


Fue un vehículo ciertamente importante para reforzar la imagen de marca de Ford en Alemania, ya que en los pocos años de vida del modelo se fueron incorporando importantes innovaciones técnicas en su momento como los frenos de disco delanteros y el "starter" automático que no requería tirar de la clásica palanquita para arrancar en tiempos fríos. A la larga, Ford confió en Alemania de tal forma que la mayoría de los vehículos para Europa de la firma americana se diseñaron y construyeron en gran parte en este país, obteniendo cada vez mayor independencia con respecto a la casa madre y que con el tiempo llegó incluso a proporcionarle algunos modelos.


























 A veces ocurre que en el mundo de las miniaturas el modelo "dignifica" al original y a veces sucede al contrario, es el original el que hace agradable a la miniatura. Este es el caso (en mi opinión) del modelito de hoy, un cabrio que para mí cuenta con líneas elegantes y fluidas y una parrilla con carácter, reflejadas en un modelo de baja calidad aunque tiene mucho encanto, razón por la cual andaba detrás de él desde hace mucho tiempo. Podemos decir que este Solido cuenta con pocos detalles externos (y mucho menos internos) pero los que hay están bien puestos y lucen bastante bien: me gustaron sus luces de plástico coloreado, sus asientos de goma y unos tapacubos de impecable cromado. Camina un tanto peligrosamente sobre la línea que distingue a los diecast de cierta precisión y al cochecito de juguete, pero nunca cae sobre un lado o sobre el otro: este modelo está por encima de eso y pueden comprobarlo gastándose menos de doce euros en él. Les aseguro que quedarán satisfechos!

Peugeot 403 "Mille Miglia 1957" de NOREV

Pertenece a la colección italiana de kiosko "Mille Miglia".

El Peugeot 403 se fabricó entre 1955 y 1966 en un número de 1.200.000 unidades aproximadamente, siendo presentado en París bajo la forma de una berlina con techo practicable, aunque posteriormente se le podía encontrar bajo la forma de un cabriolet, pickup, break familiar y camioneta.

La carrocería era monocasco de acero y estaba diseñada por Pininfarina. Su mecánica consistía en motores de cuatro cilindros en donde había para elegir dos de gasolina: un 1.4 con 58 CVs que llevaba aparejada una caja de cambios de 4 velocidades, y un 1.3 recuperado del Peugeot 203, comportando la ausencia de la barra cromada del frontal para diferenciar al modelo. También había disponible un diesel Indenor 1.8  con unos 50 CVs comprado en exclusiva por la compañía general de taxis de París, aunque no se produjeron más de 100 ejemplares.

Las primeras unidades llevaban el famoso león en la parrilla, pero tuvo que ser retirado en 1958 por que en caso de atropello causaba graves lesiones al peatón o ciclista. En su lugar se colocó una barra cromada, lo que denotó una cierta preocupación por parte de Peugeot hacia la seguridad pasiva. Este automóvil también fue de los primeros en incorporar un mecanismo antirrobo Neiman ya que los modelos que no disponían de él arrancaban por botón, por lo que cualquiera podía llevarse el coche. Otras curiosidades sobre el modelo son la ocultación de la trampilla de combustible y el hecho de que fue un coche muy mediático (apareció en el cine francés de la época y, sobre todo, en la serie norteamericana Colombo bajo la forma de un cabriolet que nunca fue comercializado en EE.UU). Como punto débil del modelo, principalmente fue el sistema de frenada (lo que hacía la conducción del coche en mojado muy delicada).

El modelo de NOREV refleja un 403 que corrió en las últimas Mille Miglia italianas, en 1957. Conducido por Robert Dubuet y Pierre Dion quedó clasificado en tercer lugar en la categoría Touring Special 1600, que fue ganada por otro 403. En la general, esto representó quedar en el puesto 102. Siendo un automóvil con pocas prestaciones deportivas sin embargo sobresalió por la robustez de su motor, lo que lo hizo bastante bueno en pruebas de resistencia como el Safari Rallye, el Tour de Australia de 1956 (que ganó) o incluso en Montecarlo.





























La miniatura me ha sorprendido agradablemente, pues goza de un molde bastante bueno y sin excesos de pintura. Externamente no es un coche con demasiados detalles, pero los que hay están bien reflejados y con cierta calidad (muy buena la calandra!). Incluso en los bajos la línea de escape es independiente y esto no se suele ver en modelos de kiosko. Peor nota se lleva el interior, pero al ser tan oscuro quizás no sea tampoco culpa de la miniatura. No puedo dejar de recomendar esta miniatura del fabricante francés NOREV, sencilla pero bien hecha y además muy asequible.