El Renault Mégane Scénic (posteriormente Renault Scénic) fue uno de los primeros monovolúmenes compactos de gran tirada. Construido sobre la base del modelo Mégane berlina y presentado en 1995, el Scénic (cuyo nombre derivado de unas siglas en inglés significa "Concepto de seguridad intrínseca en un nuevo coche innovador") supuso un enorme éxito para Renault al vender casi tres millones de unidades, fabricados en plantas europeas, asiáticas y sudamericanas hasta en el año 2011.
Netamente más pequeño que su hermano mayor el Espace, el primer Mégane Scénic derivaba de un "concept car" desvelado a la prensa en 1991. Fue presentado con la visión de ser "el coche familiar del siglo XXI" y mostraba numerosas innovaciones técnicas como el uso de materiales reciclables, el ABS de serie o su moderno aspecto. Sin embargo llevaba aún componentes del Renault 9 y el 11, como los motores derivados y algunas cajas de cambio.
Pero indiscutiblemente la principal virtud de este coche familiar era la habitabilidad debida a sus tres asientos traseros independientes con mesitas abatibles o las gavetas enrasadas con el suelo, en cambio no fue destacable la capacidad del maletero a pesar de tener unas formas muy aprovechables. También y gracias a sus suaves suspensiones con barra de torsión fue un automóvil que mimaba a los ocupantes en la conducción urbana, sin embargo esa blandura perjudicó al modelo en uso interurbano al provocarse unos movimientos bastante acusados en la carrocería en los cambios de apoyo.
Mecánicamente esta primera generación del Scénic llevó bloques a gasolina y a gasóleo con cuatro cilindros en línea y potencias de entre 75 y 140 CVs, incluyendo tecnologías de 16 válvulas o el "common rail" en los diesel; sin embargo en las prestaciones el antiguo motor dTi de 100 CVs era mejor. También es necesario añadir la existencia de una versión especial con tracción integral llamada RX4 adaptada al uso en malos caminos o en situaciones de baja adherencia.
El primer Scénic tuvo hasta el final de su carrera comercial tan solo un restyling (llamado en Renault como "Phase"), acontecido en 1999. Éste consistió sobre todo en un rediseño de la calandra y ópticas con el fin de otorgarle un aspecto más moderno; de paso perdió el nombre "Mégane" ya que el modelo había demostrado merecer una entidad propia y diferenciada del resto de la gama.
A pesar de un precio más elevado que el de la berlina, el Mégane Scénic obtuvo un éxito inmediato que sobrepasó las previsiones de Renault, obligándolo a aumentar su capacidad de producción a tal punto que permitió a la marca del Rombo salir de un periodo de crisis financiera y emprender nuevas aventuras, como la alianza con el fabricante japonés Nissan.
Todavía recuerdo bien el "bombazo" que supuso para Renault la aparición del Scénic, fruto de un fuerte apoyo publicitario que llevó a muchos a la necesidad de pensar que el mejor transporte para una familia era un monovolumen (obviando las carrocerías familiares). Sea como sea ya hace mucho que conocía la existencia de la miniatura de NOREV, si bien solía tener precios demasiado elevados. Por ello no dudé en aprovechar la reedición del modelo en serie económica (solo trae un pequeño blíster) en la que parece ser que perdió la posibilidad de abrir la puerta trasera, algo que no me pareció importante. Sí me molestaron más algunas cosas como el aspecto de los faros, la ausencia del desempañador trasero o su pobre interior, lo bueno hay que buscarlo en la pintura, el molde, las ruedas... y poco más.