FIAT 1600 Sport de PCT/Salvat

 

Pertenece a la colección "Autos Inolvidables Argentinos" de la editorial Salvat Argentina.

Fabricado en Argentina por la filial italiana de FIAT, Concord,  el 1600 Sport fue un automóvil deportivo con carrocería tipo coupé de dos puertas comercializado entre 1970 y 1972, posteriormente denominado como FIAT 125 Sport hasta su desaparición en 1978. El modelo sustituía al 1500 Coupé Vignale y era la variante deportiva de la gama 1600, derivada a su vez del sedán italiano FIAT 125. 

Las líneas maestras del FIAT 1600 Sport corrieron a cargo del argentino Aldo Periz, quien trabajó sobre un diseño del turinés Alfredo Vignale. Este modelo se basaba sobre todo en el FIAT 1500 Coupé de 1966 tomando también algunos rasgos del 850 Sport, como su techo, y su razón de ser se basaba en un intento de exención de pago de royalties a Vignale sobre el coupé 1500 sin tener que renunciar a una gama propia de automóviles de corte deportivo por parte de FIAT Concord.

Los elementos aprovechados del coupé 1500 fueron el chasis y la mecánica, proveniente también del sedán 1500. El diseño original argentino conservó el morro y la línea de cintura con el agregado del techo del 850 Sport europeo, diseñado en Italia por Bertone. De esa forma se tuvo que alargar un poco la carrocería en unos centímetros, quedando al final un automóvil con trasera de tipo "fastback".

En cuanto a la mecánica empleada, consistía en un bloque de cuatro cilindros en línea con árbol de levas lateral y un cubicaje de 1.6 litros. Gracias a una mayor compresión el modelo conseguía una potencia de 92 CVs administrada por una excelente caja manual de cuatro relaciones que enviaba la motricidad a las ruedas traseras; los frenos eran de disco delante y tambor detrás y la suspensión era independiente delante mediante trapecios deformables con resortes y eje rígido tipo Hotchkiss detrás.

El modelo contaba también con un excelente tablero de mandos con multitud de indicadores, tapicería en color negro o tabaco, apertura remota del tapón de combustible, desempañador eléctrico, radio, apoyabrazos trasero abatible, luces de advertencia de puertas abiertas y faros adicionales Carello de yodo que permitían una buena iluminación en la ruta a alta velocidad.

El periodismo especializado alabó su andar silencioso, la calidad de las terminaciones, sus prestaciones dinámicas, el diseño y el puesto de conducción. Pero por contra criticó la capacidad y acceso del maletero, el accionamiento de las manetas interiores de las puertas, la escasa ventilación del habitáculo y la falta de una cerradura en la puerta derecha.

Sin duda este coupé me parece uno de los coches (netamente argentinos) más bonitos que hasta ahora he podido mostrar por aquí, siendo (en mi opinión) como una especie de SEAT/FIAT 850 Sport con esteroides. Me encantó el diseño del coche y, sobre todo, la pintura escogida, pero es que tampoco le van a la zaga otros detalles como las llantas o su frontal, de muy buen gusto; tan solo el diseño de las luces traseras no estuvo a la altura. Todo ello lo reflejó PCT en una miniatura que lo tiene casi todo: un gran molde, buenos cromados, ruedas excelentes y hasta faros sin pinchitos! Igualmente el interior es digno así como la calidad de la pintura; solamente me defraudó un poco el aspecto de los "cristales". Animo a todos a hacerse con este modelito ahora que se puede encontrar a un precio muy bueno, pero habrá que darse prisa por que comienza a escasear debido a su carácter de espécimen local.