Pertenece a una colección temática sobre clásicos japoneses de la editorial Hachette Japón.
La primera generación del Supra en Japón (tipo A70) corresponde a la tercera del Celica aunque existía una diferencia fundamental entre ellos: el Celica era de tracción delantera mientras que el Supra utilizó la propulsión. Este coupé fastback de tres puertas estuvo vigente entre 1986 y 1993 y era el sustituto del Celica XX, vendió unas 241.000 unidades y fue reemplazado por el Supra MkII en Japón.
El modelo utilizaba la plataforma del Soarer aunque menos reforzada y tuvo la posibilidad de llevar el "Aero Top", un techo de tipo "targa" (con paneles de techo retirables) disponible a partir de junio de 1986. El Supra actualizó su motorización añadiendo la turbo compresión y la arquitectura de seis cilindros en línea, llegando también a contar con un bloque de tres litros de cubicaje.
Su motor insignia, sin embargo, se puede decir que fue el 7M-GE con cuatro válvulas por cilindro y doble árbol de levas en cabeza; la variante turbo (7M-GTE) incorporaba además el sensor de posición de árbol de levas. Esta variante turbo llegó a rendir 230 CVs en la versión de 1989 gracias a un rediseño en la válvula de descarga, aventajando en más de veinticinco caballos a la versión atmosférica más potente. No obstante para Japón existió una versión local que llegó a desarrollar 280 CVs.
Otras características del nuevo Supra fueron la posibilidad de montar una caja de cambio automática de cuatro relaciones o bien dos manuales Aisin diferentes de cinco relaciones según si el modelo llevaba turbo o no, los faros retráctiles, el ABS de tres canales, el sistema TEMS de ajuste de la suspensión (ésta era doble horquilla en ambos ejes), un método para controlar los pulsos de compresión de aire de la admisión llamado ACIS y techo corredizo metálico opcional a partir de 1991.
El Supra tuvo a lo largo de su vida comercial unos cuantos restylings que afectaron sobre todo al interior en los últimos modelos. Entre el equipamiento se contó con la tapicería de cuero, el "check control", llantas de aleación de 16 pulgadas, control de velocidad, airbag, rueda de repuesto completa, interior en varios colores, un potente equipo de audio con "subwoofer" y techo solar mejorado.
Hoy muestro en el Garaje otro deportivo representativo de los últimos años 80, un vehículo por el que comenzamos a conocer el nombre de Supra en Europa si bien en nuestro continente fue mucho más conocido el de Celica. La versión de Almost Real en miniatura sigue manteniendo muy alto el estándar del coleccionable japonés de kiosko mediante un modelo sin tacha, en el que no falla ni el molde ni su pintado. Está además rodeado de una serie de detalles excelentes y un interior que, aunque monótono, cuenta con un moldeado muy preciso. Igualmente me encantaron todas las ópticas, llantas y piezas insertadas; tan solo me defraudaron un poco los "pinchitos" de los antinieblas. De todas formas es un modelo recomendable aunque con una estética, bajo mi punto de vista, un tanto impersonal y que carece del encanto de los modelos clásicos de los años 70 de la colección de Hachette.
Es que en esos años, este diseño estuvo de moda y no hubo empresa que no hiciera una versión propia. Desde el Auto Fantástico, pasando por versiones niponas etiquetadas como Dodge, hasta algún subproducto de Mazda, todos tuvieron su propuesta.
ResponderEliminarLos orientales copiaban a los occidentales y los occidentales copiaban a los orientales, el resultado no podía ser más impersonal, por no decir insípido.
El modelo está muy prolijo, Almost Real es un gran fabricante. Me sorprendieron los pilotos delanteros, no por los pinchos, sino por el exiguo grosor, metidos en una canaleta igualmente exigua, sin que sobre ni falte espacio, eso es matricería muy fina. Lo demás es lo de siempre, que no se lea despectivo: el brillo de las luces traseras, escobillas, ruedas y todo lo demás, una hermosa pieza!
Antes de que entrasen las formas más "orgánicas" (redondeces!!) este tipo de diseño era el que "partía la pana", pero en Europa creo que había otra evolución diferente: ahí tienes el Fuego, el Manta, el Capri o los coupés de Mercedes por ejemplo. A mí particularmente me encanta este tipo de diseño japonés (?) por sobrio y elegante, pero hasta BMW con el 850 parece que se inspiró un poco en ellos, sobre todo en la parte delantera.
EliminarEn todo caso eso de diseño banal lo decimos ahora tras muchas décadas y modelos después, pero en esa época esto era vanguardia y no digamos el equipamiento que traían, como la suspensión inteligente y la instrumentación digital, cosas de otro mundo.
La réplica es una maravilla, ahora además han traído más números de la colección y hay muchos coupés setenteros que me he apresurado a conseguir, con riesgo de que mi mujer me eche de casa, claro está.
Pero el vicio es el vicio ...
Verdad, lo de banal lo decimos ahora, que después de Bangle y otros sucedáneos, terminaron arruinando autos tan hermosos como un Serie 5, no es poca cosa!
EliminarHace poco leí casi al mismo tiempo que tanto BMW como Audi anunciaban cambios en la estética de sus diseños, y prometían un retorno a las bases. Es más, Audi reforzó el anuncio con la presentación de su Concept C 2025 , al mismo tiempo que Mercedes también está presentando el Vision Ionic, otro concept negro de 7 metros de largo, muy feo, pero que pretende ser un pasaporte a un mejor diseño.
Es muy oportuno, sobre todo luego de ver que los chinos ya empezaron a limpiar los diseños hace dos o tres años. Copiaron pero luego revisaron y corrigieron. Audi debió dejar sus líneas barrocas y cambiar todo para el E5 Sportback, que ni siquiera tiene los cuatro anillos!
Extraño la sensación de enamorarme de un auto, aún sabiendo que jamás lo podría manejar, por ejemplo un Countach o un Miura. Con los SUV no me pasa...