El Garaje Algabeño

El Garaje Algabeño
BMW M1 de Minichamps (c) 2025 Antonio Sivianes Gaviño

lunes, 13 de abril de 2015

Hanomag-Henschel F55 de la Ed. Atlas



Pertenece a una colección alemana sobre vehículos de transporte titulada "Legendäre Nutzfahrzeuge", publicada por Atlas Verlag.


La serie F del fabricante alemán Hanomag tenía por objetivo cubrir las necesidades del transporte de carga ligero y medio, ofreciendo sus vehículos entre los años 1967 y 1973. Esta serie F sustituyó a los Kurier, Garant y Markant comenzando por los pequeños F45 (carga útil de dos toneladas) y terminando con los F86 para 5 toneladas,  indicando la cifra de la serie la masa máxima autorizada.

El diseño cubista de la cabina respondía a los estándares industriales de la época y fue responsabilidad de Louis Lucien Lepoix, quien ya había trabajado para Büssing o Magirus Deutz. El diseño se apartaba mucho de su antecesor pues abandonaba las líneas curvas para entroncar con unas mucho más lineales, simples y despejadas. Mecánicamente todos los modelos llevaron motores diesel de 4 y 6 cilindros que rendían entre 65 y 115 CVs, el chasis era totalmente clásico a base de largueros con la estructura portante (o no)  adosada, llevando la mayoría cajas de carga planas o carrozados tipo furgón para corresponder a las necesidades de ese tipo de pequeño transporte.

La adquisición por parte de Mercedes Benz hacia la marca Hanomag Henschel en 1971 causó la rápida eliminación de la gama F siendo sustituida por los modelos T2 y significando también la total desaparición de la marca Hanomag Henschel. No obstante las matrices de la producción se vendieron al constructor austriaco Steyr-Daimler-Puch, quienes aprovecharon el diseño y la construcción de la cabina para dar forma a los modelos 590 y 690.



























No hace mucho la editorial alemana Atlas ha reaprovechado anteriores moldes (pero nada antiguos) de la francesa NOREV para dar forma a una colección de vehículos clásicos de transporte de tipo medio y ligero, fundamentalmente comercializados en Alemania Occidental. Lo interesante es que cuentan con un nivel de calidad bastante bueno y un precio muy bajo, por lo que sería buena idea hacerse rápidamente con todos los que podamos de la colección. Estas miniaturas cuentan con un detallado fino (exceptuando algunos elementos como retrovisores o limpiaparabrisas) y según el modelo podemos hallarlos más o menos perfeccionados aunque manteniendo un tono general bastante bueno, como ya iremos apreciando en en el blog. En el caso del F55 lo encuentro muy satisfactorio, con unas ruedas y cabina de calidad, buen pintado y bajos excelentes (lástima el eje metálico de las ruedas delanteras, que queda a la vista y quita realismo). La caja de transporte no lleva una "lona" demasiado realista y se ve demasiado "plasticosa", pero no es algo grave en todo caso. Sin embargo el interior de la cabina y su frontal son muy correctos (quizás el volante es demasiado grande) y junto con la presentación, en caja de tipo urna rígida, completan un gran modelo que yo no dejaría pasar de ninguna forma si es que nos atraen este tipo de vehículos comerciales.



















viernes, 10 de abril de 2015

Mercedes Benz C111 MkII de IXO/Altaya



Pertenece a la colección temática de kiosko "La leyenda Mercedes Benz", de la Ed. Altaya.


Bajo las siglas C111 se esconden una serie de vehículos experimentales del fabricante alemán  Mercedes Benz en las décadas de los 60 y 70 del pasado siglo. La empresa quería probar nuevas tecnologías y conceptos en el ámbito de la automoción que acababan de nacer, como los motores rotativos Wankel, motores Diesel mejorados y la turboalimentación. También se ensayaron las suspensiones multibrazo, las puertas "alas de gaviota" e incluso probaron nuevos interiores revestidos de cuero y sistemas de climatización.

El primero de los C111 apareció en 1969 revestido con una carrocería de fibra de vidrio y un motor Wankel de tres rotores e inyección, instalado en posición central. Un año más tarde aparece una evolución incluyendo un nuevo Wankel mejorado (en esta ocasión con cuatro rotores) que producía 370 CVs y permitía hacer circular al vehículo a casi 300 Km/h.

Para las siguientes dos series Mercedes olvidó el concepto del motor rotativo y se enfocó en la tecnología Diesel, probando evoluciones de su conocido motor de tres litros OM617 que alcanzaron potencias de 190 y 230 CVs. Mediante una carrocería dotada con una aerodinámica muy cuidada, estos modelos obtuvieron varios récords sobre todo con la definitiva evolución de su motor a gasóleo: un bloque V8 de cinco litros y doble turbo KKK con 500 CVs que llegó a rodar a más de 400 Km/h en 1979.

Estos prototipos no llegaron a caer en el olvido y Mercedes Benz se llegó a proponer en 1991 producir un deportivo inspirado en estos vehículos (se habló de que iba a llevar un motor V6 de seis litros). Sin embargo, y a pesar de haber recibido 700 peticiones en firme la marca de la estrella se echó atrás y decidió no emprender la aventura de resucitar este mito de la automoción moderna.




























De siempre he admirado este vehículo pero ignoraba de que se trataba de una especie de escaparate y laboratorio de pruebas de la marca alemana, por lo que disfruté bastante elaborando la entrada sobre el modelo de hoy. Una miniatura que apareció hace ya años formando parte de una excelente colección temática sobre automóviles de Mercedes Benz y que nos ofreció algunas piezas bastante buenas. Sin embargo a este C111 parece como si le faltara algo, aun siendo un correcto modelo no ha acabado de cumplir con las expectativas que tenía sobre él. No acierto a ver lo que pueda ser, pero a la miniatura no le faltan algunos detalles (como el extintor del habitáculo o las luces traseras) ni carece de un buen molde y además bien pintado. Creo que en un futuro buscaré la versión de Minichamps, muy alabada por los aficionados y que parece que es la versión definitiva (por ahora) de un modelo que siempre me entusiasmó.



















lunes, 6 de abril de 2015

Austin-Healey Sprite MkI de IXO/Altaya




Pertenece a la colección española "Nuestros queridos coches de antaño" de la editorial Altaya.


El pequeño deportivo Sprite ("duende") fue presentado a la prensa en Montecarlo por la BMC (British Motor Corporation) en 1958, con el espíritu de ser un vehículo divertido y barato para el aficionado. El desarrollo corrió a cargo de la compañía de Donald Healey y utilizaba muchos componentes de varios vehículos, aunque el motor era un Austin Serie A convenientemente modificado (como el que montaba el Morris Minor). Fue fabricado en el Reino Unido y Australia en un número de casi 130.000 unidades contando todas sus generaciones, perteneciendo a la primera serie unas 50.000.


El MkI "ojos de rana" (así apodado en el Reino Unido, para EE.UU fue el "ojos de bicho") estaba diseñado por Gerry Coker con el objeto de llevar faros retráctiles, pero en BMC desecharon la idea y el coche acabó teniendo ese simpático aspecto gracias a sus faros fijos (recuerda bastante al Crosley Super Sport de 1951). Este vehículo era más revolucionario de lo que parecía ya que fue el primero producido en masa que contó con un chásis solidario con los paneles de la carrocería aunque no era monocasco propiamente dicho. En esa carrocería no existían ni puertas ni maletero accesible por el exterior, y dentro llevaba un viejo conocido de la BMC: un bloque de cuatro cilindros en línea con 948 cm3 y 43 CVs de potencia "vitaminado" por un par de carburadores SU. Este vehículo fue probado por la revista inglesa "The Motor" logrando alcanzar con él los 133 Km/h y obteniendo una aceleración de 0 a 60 millas por hora en unos 20 segundos.

El departamento de competición de la BMC puso sus ojos en el Sprite y lo inscribió en numerosos rallyes y carreras internacionales, llegando a liderar su clase en el Alpine Rallye (Austria) celebrado en 1958. Pero quienes le dieron vida fueron la gran cantidad de pilotos privados y aficionados que lo escogieron como su base para aprender y disfrutar su sencillez y practicidad, siendo un temible rival de coches mucho más modernos (eso después de haber transcurrido más de cincuenta años desde que entró en producción!).




























Ya no van quedando muchos ejemplares de la gloriosa colección de los vehículos de antaño de Altaya, por lo que cuando llega alguno al Garaje es tratado con el respeto y la veneración que merece. En esta ocasión le toca el turno a un cochecito que siempre me resultó simpático y muy en consonancia con el espíritu "racing" que algunos llevamos dentro y que los ingleses supieron explotar muy bien hace varias décadas (los herederos serían los actuales Lotus, aunque en comparación mucho más caros). La miniatura se muestra con un molde preciso, no demasiado sobrado de pintura y con un interior muy aceptable aunque externamente no haya demasiado que contar. Sí me gustaron más las llantas de chapa y los cromados, así como el parabrisas y la rejilla frontal. Este cochecito está bastante cotizado y no se deja ver mucho, pero todavía es posible encontrarlo en los canales habituales siendo vendido por gente que no parece saber lo que tiene en mano (lo mismo que ocurre con otros ejemplares de la serie). Os dejo con las fotos y os presento al "ojos de rana", con una mirada entre divertida y pícara...


















jueves, 2 de abril de 2015

Peugeot 604 V6 "Pompiers du Var" de NOREV






El Peugeot 604 fue una berlina de media/alta gama fabricada entre 1975 y 1985 según un diseño de Paul Bracq y Pininfarina. De este modelo se produjeron unos 150.000 ejemplares tras la presentación en el Salón de Ginebra y tuvo como principal competidor doméstico al Renault 30. Era una berlina espaciosa y con ciertos lujos dotada de líneas muy clásicas (y no solo en el exterior) que se rompían un poco en la impresionante calandra, con unos enormes faros que recordaban un poco de lejos a los Mercedes de aquella época.


Siendo el vehículo más prestigioso de la gama de Peugeot por aquellos años se decidió que debía llevar motores en consonancia con su rango. Por lo que inicialmente llevó un bloque de seis cilindros en línea de 2.6 litros y 136 CVs alimentado por gasolina y fruto de una colaboración con la sueca Volvo. Los planes eran haberle incorporado un V8 pero en el desarrollo del vehículo influyó la crisis del petróleo y hubo que descartarlo. De todas formas fue un bloque muy derrochador en combustible en su versión carburada y brusco a bajo régimen, problemas que se trataron de arreglar con la versión de inyección Bosch aparecida más tarde. La caja de cambios de serie era manual y en opción una automática GM pero poco recomendable por su falta de flexibilidad, por lo que se decidió sustituir por la más conocida ZF. Tampoco fue un modelo que brillase por su calidad a bordo, los materiales eran claramente mejorables y el equipamiento no impresionaba a nadie...

Sin embargo no todo era malo en el 604. Los puntos fuertes del modelo había que buscarlos en su estabilidad, dirección y frenado gracias a su suspensión totalmente independiente, un volante que accionaba un sistema hidráulico y los cuatro frenos de disco. Además contaba con un gran espacio trasero, un enorme maletero y unos asientos realmente cómodos que "mimaban" a sus ocupantes por lo que fue considerado como un gran rutero para hacer muchos kilómetros por autopista.

El resultado fue un proyecto que quizás se quedó a medias, pues tuvo la mala suerte de encontrarse en medio de unos tiempos complicados para las grandes berlinas. Peugeot quería algo parecido al Citroën SM pero jugando la carta de la discreción, el fabricante de la marca del chevrón se percibía como mucho más avanzado (solo había que ver su modelo CX) y además se creó un problema con la aparición del Tagora, un modelo creado para la nueva marca del grupo PSA Talbot. Por lo que se considera actualmente que el 604 fue un modelo fallido en término de ventas y de crítica, aunque se pudieron ver bastantes en el ámbito estatal francés de esos años (la versión alargada de Heuliez fue el vehículo oficial del presidente Giscard D´Estaign).

























Precísamente una versión dedicada al servicio de la comunidad es la escogida por NOREV para presentar una actualización de un viejo molde, insertándola en una serie dedicada a los vehículos de Bomberos. En efecto, el modelo representa al parecer un coche del jefe de la dotación del departamento de Var, en el sur de Francia. Lo cierto es que la actualización es bastante satisfactoria y el modelo gana mucho con todo el detallado externo (muy buenas manillas de puertas y luces), pues la base (el molde) es muy buena. Los cromados también ayudan mucho a conseguir el efecto deseado de lograr una miniatura de calidad pero aun quedan detalles para pulir del viejo modelo: el interior es nefasto, ausente de detalles, la base es totalmente plana y la antena trasera totalmente pasada de grosor. No obstante el modelo es bonito a la vista y es algo escaso de obtener, la oferta a 1:43 del 604 no es abundante y para lo que hay este NOREV es un excelente modelo.





















lunes, 30 de marzo de 2015

Maserati Mistral Spyder de IXO





La versión descapotable del Maserati Mistral solo llegó a producirse en un número de 123 unidades, lo que da idea de su exclusividad. Junto con su hermano el coupé, los Mistral tenían la misión de sustituir al exitoso 3500 GT jugando las cartas del aerodinámico diseño de Pietro Frua y unos potentes motores seis cilindros en línea con 3.7 y 4 litros de cilindrada que sobrepasaban los 250 CVs. El coupé se presentó en Turín en 1963 y se puso en producción un año después pero realmente la versión más especial fue el "Spyder", un precioso cabrio con capota plegable que permitía disfrutar del placer de conducir al aire libre.

Este cabrio fue de los pocos que Maserati ha producido en su historia y también uno de los más vendidos. La versión de cuatro litros estuvo disponible con sistema de inyección Lucas pero no para el mercado estadounidense, pues era algo complicada de regular y allí se determinó importar oficialmente solo las versiones con carburador. Su calidad de construcción fue notable y también su ligereza, gracias sin duda a su chasis construído en un 70% de aluminio y 30% de acero que lo hacían menos complicado de conducir que su antecesor el 3500 GT. Redondeaban el panorama un precioso salpicadero y unas llantas Borrani (que al final de su vida comercial fueron sustituidas por unas menos afortunadas en aleación), haciendo las delicias de sus afortunados (y ricos) propietarios.

Finalmente en 1970 estos bellos vehículos salieron del catálogo de Maserati y las unidades que han perdurado en el tiempo no han hecho otra cosa que revalorizarse, estimándose su precio actual en más de 120.000 euros. Tienen en contra algunos problemas de óxido y su competencia (Ferrari sobre todo), y el hándicap de la aversión de muchos puristas hacia los motores de seis cilindros en línea...






















Hace un tiempo presenté una floja versión del Mistral coupé de coleccionable y siempre lamenté no haber podido conseguir un modelo de más calidad de este automóvil, por lo que ahora me "desquito" mostrando la variante descapotable que IXO realizó hace ya años. Un modelo claramente a la altura de lo que podían hacer otras marcas de más renombre y que no deja indiferente a nadie por sus detalles, como su preciosa capota recogida, un fantástico interior y unas Borrani totalmente realistas. Igualmente relucen su molde y el pintado, así como todos los detalles externos incluyendo su matrícula californiana. Solo los bajos ennegrecen un poco el panorama y la ausencia de los parasoles, pero son lunares que no afean para nada un cuerpo tan bonito.