El Garaje Algabeño

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Dodge Dart Barreiros 270 de IXO/Altaya (c) 2024 Antonio Sivianes Gaviño

viernes, 21 de mayo de 2021

Renault FR1 TX/GTX "Tourisme Verney" de IXO/Hachette

 

Pertenece a la colección de kiosko de la Ed. Hachette Francia "Autobuses y autocares del mundo"

El Renault FR1 fue el primer y verdadero autocar moderno de RVI (Renault Vehículos Industriales). Elegante y sobre todo muy fiable el FR1 estaba destinado a reemplazar a los Berliet PR y SAVIEM E7, algo que consiguió con el tiempo si bien al principio encontró reticencias por parte de los empresarios franceses.

Diseñado y desarrollado en el Centro de Estudios Renault de Nanterre (cerca de París), el FR1 partió totalmente desde cero y no supuso, contra lo habitual, un trabajo sobre la base de otro modelo anterior. Su diseño cúbico incluía un interior de tipo avión con asientos especialmente concebidos para él; su tablero de mandos estaba diseñado con formas rectangulares (y no muy ergonómicas) que recordaban a los salpicaderos de los turismos Renault de la época y aunque la estructura general del vehículo seguía siendo la clásica de tubos de acero en esta ocasión incluía un tratamiento anti-óxido mediante cataforesis, algo que no se había hecho nunca anteriormente sobre un autocar.

También su planta motriz era nueva, un seis cilindros diesel en línea situado en la parte trasera con casi diez litros de cubicaje y 285 CVs de potencia derivado en parte del bloque que montaba el Berliet PR14. Igualmente la caja de cambios era inédita aunque era un desarrollo sobre otra anterior que incorporaba la gama de camiones pesados, no obstante estaba disponible para quien lo requiriese una automática ZF. Otras características incluyeron la suspensión independiente, frenos delanteros de disco por mando hidroneumático (posteriormente con ABS) apoyados por un ralentizador electromagnético, tres longitudes de chasis con tres niveles de equipamiento y carrocería realizada por Gangloff en Alsacia.

Presentado en 1983, el FR1 causó una fuerte impresión pero las entregas no despegaron a causa de la fuerte competencia que establecían los Bova, SETRA y Van Hool, a tal punto que de las 300 unidades inicialmente previstas para ser vendidas en 1984 tan solo se entregaron 24. Pero poco a poco las virtudes de fiabilidad, modernidad y confort que tenía el FR1 fueron convenciendo a los clientes y tras limar algunos defectos RVI logró meter cabeza a tal punto que en no mucho tiempo su cadena de montaje no daba abasto; únicamente los modelos más grandes y super lujosos encontraron más dificultades para encontrar compradores.

A partir de 1987 el FR1 fue evolucionando al incorporar nuevas motorizaciones de 185 y 340 CVs (esta última de Mack) y asientos alemanes Vögel; también aparecieron versiones con carrocería sobre-elevada y para largos recorridos. Posteriormente muchos FR1 acabaron vendidos de segunda mano en muchos países pero antes algunas empresas de viajes y turismo como Verney (que llegó a poseer hasta 580 ejemplares) dieron buena cuenta de las poco más de cinco mil unidades fabricadas. Sin embargo y a pesar de su éxito, RVI no mantuvo el nombre y cuando en 1996 el sustituto (o más bien restyling) del FR1 apareció fue renombrado como Iliade, borrándose toda referencia al modelo anterior.














El modelo de hoy es de los últimos aparecidos en la añorada colección de Hachette sobre autobuses y autocares mundiales, aunque el enfoque terminase siendo más bien europeo. Pero en lo que respecta a la miniatura realmente convence bastante en un primer vistazo, si bien pronto notaremos que el interior sigue siendo casi de juguete y externamente prima mucho la sencillez, reconociendo que el moderno diseño del FR1 no daba para muchas florituras. Al menos tenemos un buen esquema de colores y la parte trasera quedó muy aparente, los limpiaparabrisas no quedaron mal del todo y por lo que costaba la miniatura "nos llevamos mucha cantidad". No tiene el encanto de los modelos clásicos, pero en la vitrina os aseguro que hace su impacto.


















7 comentarios:

  1. Tú lo has dicho: el diseño es tan limpio que no admite demasiada floritura.
    En tal sentido, creo que el trabajo del chino modelista, ahora que no hace Inolvidables argentinos, se pudo dedicar mejor a tu bus francés, jej!
    En verdad, me parece muy bien resuelto, desde el cromo interno de las luces principales hasta el perfil de los asientos, que se ven anodinos pero bien dibujados, al menos en las fotos. La trasera también se ve completita, entre insertos y tampos no quedó un sólo lugar sin resaltar.
    Para destacar el detalle de las manijas para abrir las compuertas de equipaje laterales!

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    1. La verdad es que hay más detallado del que aparenta, es un buen modelo que salió con un excelente precio aunque no pretenderemos un Minichamps, claro.

      A mí mr gustaron bastante las pegatinas traseras especificando comodidades y características, mira tú por donde...

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    2. aha, buen detalle, no lo había notado, acá también se usa mucho

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  2. A mi me sorprende el parabrisas tan grande y de una sola pieza para un autobús de ese año. Me gusta el limpio diseño como mencionan y los faros y luces rectas, mas que como las luces extrañas y pequeñas que los buses de ahora traen además de esos enormes retrovisores con formas como de cuerno de carnero.. ja, ja..
    Hermoso modelo a escala.

    Saludos !!

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    1. Esa linea ya estaba aqui por los setenta. Los de ahora son un poco "marcianos", pero más cómodos, rápidos y seguros.

      Saludos!!

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  3. Si en la Universidad de Nanterre se gestó el Mayo del 68 francés, tampoco es de extrañar que en la misma población se creara el nuevo estilo de los autocares y buses Renault. No son tantos quince años para quienes respiran el mismo aire.
    La combinación de colores blanco, naranja y gris casa perfectamente con los grandes ventanales del modelo. Para viajar y disfrutar.
    Por cierto, qué bien le vino a Renault la absorción de Mack, incorporando los potentes motores yanquis a su propia gama.
    Saludos.

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    1. Pues no, no son tantos! Y sí, había un poco de revolución en este autocar.

      En cuanto a los Mack (o "Maca", como los llamamos los del "rosquito") sus motores dieron un buen resultado en el modelo Magnum y AE (ambos son camiones pesados). Gastaban algo más pero eran más fiables que los de origen Renault. Yo padecí uno de esos, con calentones a menudo y mezclando agua y aceite (y ya sabes lo que significa, supongo).

      Saludos!!

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