Pertenece a la colección "Autos Inolvidables Argentinos" de la editorial Salvat Argentina.
Basado en la versión europea del Ford Escort Mk V, el Volkswagen Pointer fue un coche de segmento urbano vendido por Autolatina en Argentina, Brasil y Uruguay entre 1994 y 1996. El modelo estuvo disponible con carrocería de tipo "hatchback" de cinco puertas y tuvo una variante, denominada como "Logus", con cuerpo de sedán de dos puertas y disponibilidad a partir de 1993.
El automóvil había sido diseñado para ser comercializado en Sudamérica por Autolatina, una "joint venture" (o asociación de empresas temporal) entre Ford y Volkswagen. Bajo la forma de un "hatchback" compacto con un enorme cristal trasero y gran luminosidad, el Pointer tenía sobre todo un aire más Ford que Volkswagen, empleando de esta última algunos elementos como los grupos ópticos, los parachoques y elementos estilísticos en el interior.
Las versiones presentadas en octubre de 1993 (CLi, GLi y GTi) empleaban motores a gasolina de cuatro cilindros en línea con inyección electrónica monopunto o multipunto y cubicajes de 1.8 y dos litros. Asociados a estos motores se disponía de una caja de cambios manual de cinco relaciones (con un buen tacto) y catalizador, mientras que la dirección era de tipo progresivo, los frenos de disco integrales para la versión GTi y las suspensiones independientes de tipo McPherson con estabilizadora detrás.
En el diseño del interior se notaba la mano de Volkswagen por su salpicadero de tipo envolvente con un sobrio aspecto. En el cuadro de mandos existía un velocímetro, cuentarrevoluciones, nivel de temperatura y combustible complementados con luces indicadoras. También se disponía de reloj, alarma de olvido de luces encendidas, columna de dirección regulable, equipo de sonido con frontal extraíble y opción de CD, encendedor con cenicero, alarma, elevalunas y retrovisores eléctricos y, opcionalmente, techo solar con accionamiento a manivela.
El modelo no tuvo apenas tiempo de evolucionar, por lo que los únicos cambios reseñables fueron los paragolpes pintados, la tapicería de terciopelo, llantas de 14 pulgadas (usadas también en el futuro Polo Classic) y volante de cuero para el acabado GTi. Precisamente este mismo modelo tuvo de inicio problemas con el desarrollo de la quinta velocidad de la caja de cambios, demasiado corta, por lo que aumentaba el consumo y el nivel sonoro con unas prestaciones inferiores. Esto se solucionaría con la adopción de una quinta marcha más larga a partir de mediados de 1994.
Finalmente, en 1996 se disolvió Autolatina y el Pointer pasó a ser discontinuado, ocupando su lugar los nuevos Ford Escort y Volkswagen Polo Classic (o SEAT Córdoba). El modelo es recordado por su agradable línea, su buena adaptación al mal estado de las vías sudamericanas y su agilidad en la conducción, aunándose con un buen confort interior.
Hoy os presento otro modelo totalmente desconocido para mí, pero con un aire lateral que me recordaba bastante al conocido Escort de principios de los 90. El Pointer, como así se llama, forma parte de esos moldes inéditos con los que la editorial Salvat nos descubre a los europeos otras declinaciones de los modelos conocidos por aquí, con mayor o menor alejamiento. Por lo que respecta a la miniatura, va en la línea general de PCT de ofrecer cierta calidad a precio adecuado (con rebajas); aunque en este caso el interior es demasiado justo y hay fallos en el encastre de los "cristales" también tenemos golpes de calidad como las piezas de plástico insertadas simulando las ópticas, los tapacubos, una pintura muy bien escogida y la presencia de otros detalles como las matrículas o los retrovisores con espejos.