Bond Minicar Mark C Deluxe Family Safety de IXO/Altaya

 

Pertenece a la colección de kiosko "Microcoches de Antaño" de la editorial Altaya España.

La serie de microcoches Minicar de tres ruedas del fabricante inglés Bond Cars Ltd. estuvo a la venta entre los años 1949 y 1966 estimándose las ventas en casi 25.000 ejemplares. El Minicar estuvo presente a través de varias generaciones denominadas según las siete primeras letras del abecedario, y su razón de ser fue sobre todo de tipo económico ya que los vehículos de tres ruedas gozaban de rebajas de impuestos y además podían conducirse con licencia de motocicletas.

Hoy nos detendremos en la serie (o "Mark") C, aparecida en 1952 y con una vigencia de cuatro años. Bautizado en su momento como "ESC" ("Automóvil más pequeño de Inglaterra"), el modelo de pre-producción fue presentado en el salón de la motocicleta de Earl´s Court de noviembre del 51. El diseño fue bien recibido, pero por un retraso en la producción solo comenzó a venderse casi un año después.

El cambio de estilo con respecto al Mark B fue tanto funcional como estético. El Mark C utilizó un nuevo sistema de dirección que aprovechaba el diseño mejorado de las prominentes aletas delanteras, formando parte de unas líneas más depuradas y suaves tal y como demandaban los clientes de la marca; además ahora favorecían una mejor ubicación para los faros. También se mejoró la capacidad de frenado de las tres ruedas gracias a un sistema de varillas y cables al igual que la suspensión.

Ésta, llamada "Flexitor", consistía en un conjunto de amortiguadores con palancas y brazos basados en silentblocks de caucho y un montaje de varillas, unidas a una carcasa externa atornillada en los bajos. El sistema además permitía un poco de movimiento vertical a cada eje trasero independiente. En cuanto al propulsor, iba atornillado en una base de acero sobre un soporte que también sujetaba al eje delantero, una solución diferente a la que había empleado el Mark B y que tantos fallos había provocado.

La carrocería pasó a contar de forma estándar con una sola puerta lateral, algo que se podía pedir opcionalmente en el modelo anterior. La construcción, de tipo monocasco, aportaba la rigidez estructural necesaria al triciclo pero limitaba bastante el tamaño de la puerta y por ello hubo que adosar unos refuerzos de acero alrededor del acceso. Posteriormente (hacia 1954) se sustituyó el capó de aluminio por otro en fibra de vidrio, más ligero y con un coste de fabricación similar.

En lo referente al propulsor, inicialmente montaba un Villiers 6E monocilíndrico con 197 cm3 que proporcionaba unos 7 CVs pero en 1953 fue sustituido por el tipo 8E, con un par de caballos más. En este mismo año se introdujo el nuevo parabrisas Triplex, se eliminó la guantera, se rediseñó el asiento y algunos mandos cambiaron. También se incluyeron los paragolpes delanteros en el acabado Deluxe y para octubre de 1955 varió la forma de la parrilla, pasando de ser oval a casi trapezoidal.

El Mark C estuvo disponible al principio como Standard Tourer o Deluxe Tourer con banqueta simple y capacidad para dos o tres personas, montando siempre una caja de cambios manual de tres velocidades. El Deluxe poseía arranque eléctrico además, pero en marzo de 1954 la gama aumentó con las nuevas versiones Standard Family Safety y Deluxe Family Safety, con carrocerías extendidas que aportaron un espacio para colocar un par de asientos infantiles.

El modelo probó suerte en el mercado estadounidense al ser comercializado con el nombre de Sharp´s Bear Cub, distribuido por Craven y Hndrick de Nueva York; sin embargo el acuerdo tuvo poco impacto y se rompió al poco tiempo. Sin embargo, en el Reino Unido las ventas no fueron mal y se lograron colocar 6.399 unidades, una cifra bastante superior a las casi 1.500 obtenidas por el Mark B.

Nos iban faltando representantes ingleses en el entorno de los microcoches y por aquí tenemos uno de los primeros, formando parte además de la amplia tradición anglosajona de los vehículos de tres ruedas. Este extraño ejemplar de coche "zapatón de payaso" posee un diseño que no dejará indiferente a nadie pero revestido de cierta elegancia propia de la época, incluyendo una bonita capota de lona remachada y un precioso color marrón metalizado. La miniatura supo reflejar al minúsculo modelo mediante un buen molde, una excelente pintura y muchos detalles de calidad, como se puede ver en la parilla cromada o en el interior, aunque parece que se pasaron un poco con el volante. Muy buena nota también para las ruedecitas, matrículas y luces; el modelo pasa el corte sin problemas y se hace recomendable.