Mitsubishi i-MiEV de Sun Star (Edición Dealer)

El Mitsibishi i-MiEV (acrónimo en inglés para "Vehículo eléctrico innovador de Mitsubishi") es un automóvil de tipo "kei car" movido por baterías recargables fabricado en la factoría de Kurashiki en Japón. Es el mismo modelo que los europeos Peugeot Ion o Citroën C-Zero, siendo el primer vehículo eléctrico operable producido en masa para gran parte del mundo.

El i-MiEV se puso a la venta en 2009 primeramente para flotas y un año después estaba disponible para particulares. La versión norteamericana es algo mayor y tiene varias características adicionales, pero el grueso de las ventas correspondió a Japón y Europa (estimándose unas 50.000 unidades puestas en la calle en 2015 por todo el mundo incluyendo las versiones mini taxi).

La presentación de este "kei car" tuvo lugar en una exhibición de vehículos eléctricos en Yokohama (Japón), después las investigaciones efectuadas por Mitsubishi Motors para crear una infraestructura completa de carga de baterías conjuntamente con tres compañías eléctricas. Esta primera versión llevaba acumuladores de iones de litio y anunciaba una autonomía de 160 Kmts, con una velocidad punta máxima de 130 Km/h. Inmediatamente comenzaron las conversaciones con el grupo francés PSA para llegar a un suministro de 100.000 unidades durante un período confidencial.

La versión inicial de producción llevaba un motor síncrono de imán permanente montado en la parte trasera del eje, con una potencia de 47 kW y un par motor de 180 Nm. Dicho motor se encuentra refrigerado por agua (mediante un radiador con electroventilador convencional situado delante) y mueve las ruedas a través de una transmisión de engranajes reductores. La batería que almacena la corriente tiene una capacidad de 16 kWh y está compuesta por un paquete de 88 celdas situada en los bajos del vehículo, siendo fruto de la ingeniería combinada de Mitsubishi y GS Yuasa Corp. Para evitar situaciones de calentamiento, existe un sistema de ventilación forzada  e incluso se aprovecha el aire fresco de la climatización para la carga rápida.

El sistema de baterías evolucionó en 2011 al tipo SCiB de Toshiba, una tecnología que soporta 2,5 veces más ciclos de carga/descarga y además permite la carga al 80% de la capacidad total en solo 15 minutos, aparte de la reducción en peso y tamaño. No obstante, para una carga desde un enchufe convencional casero de 220 V se necesitan 7 horas al menos. Y, como en cualquier coche convencional, existe una batería de 12 V necesaria para el arranque del sistema principal que se recarga a partir de un dispositivo de reducción de voltaje DC-DC.

Como curiosidad, el i-MiEV podría ser usado como fuente de energía eléctrica en caso de corte de energía. Dicha característica fue ideada tras la catástrofe del terremoto de Tohoku (2011) y el posterior tsunami, con el fin de suministrar 5 o 6 horas de corriente a 100 V pero dicho sistema no está claro si va a estar disponible finalmente.

Otras características del vehículo incluyen calefacción del habitáculo, ruedas delanteras y traseras de tamaño diferente, kit de reparación de neumáticos con compresor, sistema ABS con frenos de disco delanteros, control de tracción y una buena puntuación en el "crash test" de Euro NCAP (cuatro estrellas). Aunque era un vehículo caro de adquirir (33.000 euros), las políticas gubernamentales de los diferentes países de la Unión Europea permiten sustanciales rebajas que en el caso de España (plan MOVELE) pueden llegar a los 2.500 euros y la exención de pagar aparcamiento en las zonas azules.




























Está claro que el futuro del automóvil pasa por el abandono del motor de combustión por la alternativa eléctrica, siempre y cuando ésta sea generada por medios renovables. El Garaje Algabeño, siempre preocupado por el medio ambiente, presenta hoy una simpática miniatura de Vitesse para el fabricante chino Sun Star de un i-MiEV versión japonesa con volante a la izquierda. Este modelito es realmente preciso y muy rico en detalles, pero con un fallo importante en la calidad ya que mi unidad sufre de "peste del zinc", apreciable por la multitud de grietas existentes. En fin, en el tiempo en el que dure entero disfrutaré de un curioso cochecito que se ofreció primeramente en concesionarios y cuyo original he podido ver alguna que otra vez rodando por Sevilla.