La quinta serie del sedán de lujo japonés Nissan Cedric estuvo a la venta entre 1979 y 1983 bajo las formas de un sedán de cuatro puertas con y sin pilar B ("Hardtop"), un familiar de cinco y la versión comercial; no obstante también existió una rara versión abierta para acontecimientos especiales como representación en las galas de la policía nipona.
En esta generación el diseño de Toshio Yamashita se mostró afín a las líneas rectas y simples en contraposición a las curvas del modelo anterior "Tipo 330". Este vehículo puso de moda, sobre todo en Asia y Oriente Medio, la carrocería "Hardtop" que básicamente es como la de un sedán aunque con la ausencia del pilar B; en contrapartida desapareció la versión coupé de dos puertas.
Las características principales del modelo en lo mecánico incluyeron nuevas suspensiones con multibrazo en el eje trasero y la aparición, por vez primera en Japón, del montaje en un modelo de serie de un motor diesel de seis cilindros en línea o el turbocompresor, también instalado en los Bluebird y Skyline. Por lo demás disfrutó de una excelente carta de motores con arquitecturas de cuatro y seis cilindros para gasolina y diesel, con cubicajes de dos, 2.2 y 2.8 litros. Los frenos eran de disco en todas sus ruedas y las cajas de cambio podían ser manuales de cinco y cuatro velocidades o bien automáticas de cuatro y tres; a pesar de tener casi 4.8 metros de longitud su contenido peso de algo menos de tonelada y media no lo hacía un coche dinámicamente aburrido, sobre todo en las versiones turbo.
A lo largo de su carrera comercial el modelo fue evolucionando con la adición del control automático de velocidad, paragolpes de uretano pintados, rediseños de salpicadero, asientos eléctricos, mejoras en la eficiencia de los motores con un mayor control de emisiones y la aparición de versiones especiales como la "Brougham" (con tapizados especiales, consola en techo y emblemas en la parrilla y asientos) o las "Excellence" con y sin turbo, éstas venían con tapizado bicolor, el mismo equipo de audio especial del "Brougham" y unas rayas pintadas en los laterales de la carrocería.
Finalmente, y tras haberse vendido unas 266.000 unidades, el MkV dejó su lugar en junio del 83 al "Tipo Y30", la sexta generación del Cedric que estaría vigente casi hasta a principios del siglo XXI.
Dentro de los grandes sedanes japoneses de mediados y finales del siglo XX los Cedric siempre tienen un lugar privilegiado en mis preferencias, por ese aspecto tan americano y señorial que los hacía imponentes frente a los europeos de su segmento (lo de los estadounidenses ya es cosa aparte). Por eso siempre que puedo intento conseguir estas miniaturas que en su mayoría suelen ser NOREV o DISM, aunque no se suelen dejar ver fácilmente a precios asequibles. En esta ocasión y a pesar de los fallos percibidos en algunos detalles (como en las luces o el interior) quedé muy satisfecho con este Cedric y sus abundantes cromados, la buena realización en la delantera y la trasera o el pintado, de una calidad muy correcta. Tampoco el molde parece tener mala pinta. En todo caso muy recomendable; tan solo espero que no sea el último de su estirpe que pueda añadir a mis vitrinas.
Como me encantan estas berlinas de NISSAN que vienen a ser lo que nuestros Bluerbid en su día fueron, y de ahí al Máxima y nunca mas se supo, vale que la realidad es que no nos va aquello de pagar 7 millones de pesetas por un Nissan cuando en aquella época ya se podía tener un Mercedes de lujo
ResponderEliminarMe encanta esta saga de los Cederic, y esta colección de japoneses amén de larga esta dejando unos modelos muy suculentos
Saludos
;)
Éste no es de colección de kiosko, si no un "pata negra" de NOREV. Pero tampoco hay demasiadas diferencias, si acaso parece que están un pelín mejor cuidados.
EliminarLa verdad es que el que tenía una berlina de ésas la conseguía a precio "de amigo" por que no se vendían ni a tiros en el concesionario.
Pero estos Cedric ni de coña llegaron a España...
Saludos.
Ante todo, hay que decir que el modelo transmite la sensación de gran empaque, de peso pesado, incluso a través de las fotos. El color, los cromados y los insertos colaboran para mejorar la percepción.
ResponderEliminarPodemos criticar los puntitos negros de las luces o el interior demasiado esquemático, pero prefiero mirar el vaso medio lleno y aplaudir el resultado de Norev.
Mis felicitaciones al chef!
Claro, ten en cuenta que luego alguno de esos modelos era para la Casa Real o altos funcionarios. Coches de representación...
EliminarEstoy contigo, hay fallos pero el modelo en mano te aseguro que transmite muchas y muy buenas cosas. Bien por NOREV al sacar tantos modelos japoneses de las décadas pasadas...
No acabo de entender la ausencia de pilar B en un sedan 4 puertas, en un cupe todavía tiene un impacto visual, pero en una berlina supongo que debe comprometer algo la rigidez estructural de la carrocería además de colarse silbidos del viento en el interior.
ResponderEliminarEso si, la miniatura lo clava!
Saludos!
Yo lo que me pregunto es cómo enganchará la puerta trasera, me imagino que habrá medio pilar oculto... O cómo se sujeta el cinturón de seguridad...
EliminarPor lo visto este tipo de carrocería debía ser algo no habitual, desde luego en Europa no recuerdo modelos así.
Saludos, Xavi-San!