El Garaje Algabeño

El Garaje Algabeño
Renault AE 520 de IXO (c) 2025 Antonio Sivianes Gaviño

domingo, 12 de enero de 2025

Ford Falcon Futura convertible presidencial de Arturo Illia de PCT/Salvat

 

Pertenece a la colección argentina "Vehículos Inolvidables de reparto y servicio" de la ed. Salvat.

Auténtico mito rodante de la industria automovilística argentina, el Ford Falcon comenzó a ser producido en 1962 hasta terminar su carrera comercial en 1991. El modelo, de procedencia norteamericana, era un automóvil compacto para sus estándares pero de tamaño grande para Argentina, país en donde apreciaron sus virtudes de comodidad, robustez y versatilidad por la cantidad de versiones disponibles.

Fue en diciembre de 1964 cuando aparece la primera unidad del Falcon Futura nacional, un modelo con techo de vinilo, asientos de tipo butaca y una consola de mandos muy completa. Iba equipado con un motor a gasolina de tres litros de cubicaje y seis cilindros en línea que rendía unos 85 CVs. En cuanto a su caja de cambios, era manual de tres velocidades si la palanca iba en la caña de la dirección o bien de cuatro si estaba fijada al suelo.

El modelo también incorporaba frenos de tambor en todas las ruedas, sistema eléctrico de 12 V con dinamo, pintura bitono, parrilla de aluminio con lamas horizontales y dos niveles de acabado: "Standard" y el "Deluxe". Éste se diferenciaba por algunos adornos externos, la luz de marcha atrás y unos tapacubos más elegantes; en su interior también ganaron prestancia el aspecto de algunos mandos.

Ya en 1965, la fábrica de Ford de General Pacheco puso a disposición del presidente argentino Arturo Illia un modelo especial con cuatro puertas sin techo y sin capota, por lo que solamente se podía usar en días sin lluvia. Esta unidad contó con un marco estructural en el parabrisas que aportaba rigidez, refuerzos laterales y en plataforma pero sin cambios en la mecánica con respecto al modelo de serie.
















Nueva incorporación a la subtemática de coches presidenciales, en esta ocasión para un presidente argentino que fue derrocado en 1966. La razón de su compra fue la bonita y elegante presencia que tiene el modelo, sus buenos detalles (incluyendo su completo interior) y una gran cantidad de cromados que destacan sobre la pintura negra brillante. Me resulta complicado ponerle pegas a una miniatura tan vistosa y bien hecha con un coste realmente bajo, por lo que no puedo más que recomendarla.

















No hay comentarios:

Publicar un comentario

Siéntete libre de reflejar lo que piensas sobre esta entrada!