El Alfa Romeo 156 fue un automóvil de tipo sedán clasificado dentro del segmento D (medianos) producido en la planta de Pomigliano entre los años 1997 y 2007, si bien algunos modelos llegaron a ensamblarse en Thailandia. El reemplazante del 155 constituyó un gran éxito para la marca italiana al haberse producido en casi 700.000 unidades, siendo sucedido por el modelo 159 aunque con mucha menos repercusión.
La razón de la existencia del 156 fue sobre todo intentar agradar al público aficionado a la marca milanesa, un tanto defraudado tras la comercialización del 155 por considerarse como algo negativo el uso de muchos componentes de FIAT y, sobre todo, por el abandono de la propulsión trasera. Por ello el diseño de Walter de Silva combinado con el trabajo del Centro Giugiaro dieron lugar a una bella carrocería de rasgos fluidos que entraba rápidamente por los ojos, sin descuidar su apartado dinámico al contar con una menor masa gracias al uso de materiales ligeros y por la utilización de la suspensión trasera independiente directamente derivada de la que llevó el Lancia Delta Integrale.
La base del vehículo fue la plataforma Tipo II Rev. 3 compartida también por otros modelos del Grupo FIAT, en particular el GT, el Lancia Lybra y el Alfa Romeo 147. Esta plataforma equipaba suspensiones independientes y podía acomodar motores de disposición transversal, siendo en gran parte fundamental para el gran desempeño dinámico del 156.
El modelo definitivo fue mostrado en el Salón de Frankfurt de 1997 creando una gran sensación desde el primer momento con 90.000 pedidos en firme en los cuatro primeros meses, siendo además merecedor del título de "Coche del Año" en 1998 en Europa. Inicialmente estuvo disponible solo con carrocería tipo sedán de cuatro puertas (aunque daba la sensación de tener dos gracias al recurso de esconder las manetas traseras), pero en el año 2000 apareció la versión familiar de cinco puertas llamada "Sportwagon" complementada años después por la versión todocamino "Crosswagon".
Uno de los rasgos más evidentes del modelo fue su facilidad de conducción y comportamiento dinámico gracias también a la rigidez de la carrocería y el sistema McPherson evolucionado de suspensión trasera. También colaboraron su dirección (muy directa) aunque resultaba un poco incómoda en las maniobras de aparcamiento y, solamente para algunos modelos, la tracción total Q4 con tres diferenciales o los sistemas electrónicos VDC y ASR, combinados con el ABS para frenado.
En cuanto a la motorización, el 156 se ofreció con variantes a gasolina de cuatro y seis cilindros (este último en arquitectura de V) con potencias de entre 120 y 250 CVs, casi todos con doble bujía "Twin Spark". Pero no olvidaron tampoco los motores a gasóleo al estar disponibles los nuevos bloques JTD de cuatro y cinco cilindros rindiendo entre 105 y 175 CVs., los cuatro cilindros de gasolina contaban también con 16 válvulas y doble árbol de levas en cabeza. Mención aparte para el último V6 "Busso" de 3.2 litros de cubicaje con 250 CVs de potencia destinado a la potente versión 156 GTA; tras el final de la producción de este bloque se cerró la histórica planta que lo producía (Arese).
No obstante y casi al final de la vida comercial del modelo entró en escena un nuevo motor de gasolina JTS de inyección directa estequiométrica, con dos litros de cubicaje y 166 CVs de potencia que conseguía un notable ahorro de combustible sin mermar el agrado de conducción. También se sucedieron dos restylings más o menos profundos que incluyeron pocos cambios estéticos pero sí la aparición de importantes tecnologías como el cambio secuencial robotizado Selespeed o la adecuación a las normativas europeas Euro 4 referentes a las emisiones.
Muchos recordamos y añoramos al famoso Alfa 156, un automóvil que logró poner de nuevo en órbita al fabricante italiano sobre todo en el mercado europeo. Una pequeña manera de rendirle homenaje (al menos por mi parte) es tratar de conseguir la mayor cantidad de versiones disponibles, de las que tengo un GTA y esta versión con pintura especial iridiscente "Nuvola" (niebla en italiano). Dicha tonalidad implicaba un gasto extra de unos 2.500 euros y llamaba la atención por su cambio de color según el ángulo de los rayos del sol cuando incidían en la carrocería al tornarse entre verde turquesa y celeste; ni que decir tiene que en caso de desperfectos la factura del chapista ascendía mucho. En fin, en la miniatura de SOLIDO (vestida con caja de lata en edición especial con interior de terciopelo) se ve que le pusieron ganas y se cuidaron de ofrecer un interior más o menos detallado pero lo combinaron con un molde más bien mediocre y unos detalles externos básicos. Es como si la miniatura fuese como un "dealer" para clientes de concesionario poco exigentes a los que no les importará tampoco unas llantas poco logradas y una aplicación de pintura más bien basta, sin nombrar unas matrícula muy poco creíbles o ese frontal escasamente agraciado. En fin, al menos el precio es asequible y el 156 es tan bonito que por mucho que se empeñen no pueden estropearlo del todo.
Sin poner en duda la capacidad o performance del Alfa real, debo decir que nunca me gustó el estilo del 156.
ResponderEliminarQuizás porque no simpatizo con los Alfa familiares. O tal vez porque no lo veo tan italiano, sino más bien francés, como si (omitiendo calandra) se tratara de un Renault de término medio, o un Citroën.
El modelo a escala sigue por ese mismo camino. Está bien pero no tanto. Está mal pero no tan mal. En el medio, como el vaso por la mitad.
Tiene detalles interesantes pero malogrados como las manijas de puertas cromadas pero grandotas.
La pintura es un punto a favor, el molde general también, las ruedas no tanto (como bien apuntas).
Las luces tienen el pincho negro, pero justo donde estarían las lámparas de esas modernas, por lo que se equilibra la balanza.
El resto de la trompa se ve bien, tiene lo que tiene, lo que debe tener.
Las luces traseras cumplen, y el escape tiene agujerito, es más y mejor que muchos Inolvidables.
Si te gusta la marca o el auto real, tiene que estar en la colección.
Si fuera un Torino, lo agarraba y no lo soltaba!
A no todo el mundo le tiene por qué gustar, claro. Pero el hecho es que este modelo resucitó en gran parte a Alfa y se llevó un montón de premios de diseño, lo de la solución de esconder la maneta trasera para conseguir el efecto de un falso coupé creó escuela y algunos lo imitaron hasta el día de hoy. El diseño es limpio y contenido, una obra maestra en mi opinión y el de muchos aficionados. Sigue viéndose plenamente actual y no ha pasado de moda.
EliminarPara mí es una obra maestra y un coche inolvidable, sobre todo el GTA que tuve el placer de pilotar en el Circuito de Jerez... qué sonido el del "Busso", ponía los pelos de punta!
La miniatura no me gusta, vi otros dealers de SOLIDO que le dan muchas vueltas a este 156. Por mucha caja de lata que traiga... un 156 se merece siempre más.
Entiendo que sea un auto magnífico, la gente de Alfa Romeo sabe lo que hace, y hoy, con el diario del lunes, se ve que era realmente espléndido.
EliminarYo lo único que dije es que no me gusta "desde afuera".
Lo siento, no me gusta!
Fui lo primero que te puse en mi respuesta, que lo entendía, luego yo puse mis razones por lo que me gusta a mí.
EliminarNo tienes que sentirlo, hay gente a la que no le gusta tampoco el jamón ibérico de bellota!
En lo personal, creo que es un auto hermoso, el señor de Silva hizo un trabajo maravilloso, destila alfa en la trompa, el lateral es sencillo pero efectivo, quizás menos personal su parte posterior. Creo que la Nissan Pathfinder había usado el recurso de esconder la manija en el parante anteriormente, pero en vehículos muy distintos. Hasta no hace tanto, un conocido tenía uno, en impecable estado y, casualmente, en ese color, una delicia, incluso, al estar limpio de algunos aditamentos (grandes alerones y otros) que traían versiones mas guerreras, se aprecia mas limpiamente el diseño. En cuanto a la miniatura, coincido que merece una mejor réplica, pero, hasta que ella aparezca, esta llena decorosamente el hueco. Algunos pliegues de la chapa son extremadamente sutiles, cosa que no refleja bien el modelito, como bien mencionás, la abundante pintura no ayuda. Tal vez, y dada la sutileza del modelo real, resulta un poco tosco. Se agradece el simil madera en volante y consola y que el color sea justo este, y, desde ya, no sería para despreciarlo si apareciera cerca, algo así como un término medio. Un abrazo. Luis
ResponderEliminarYo todavía me giro cuando veo alguno en buen estado. Y hasta la versión familiar les quedó de lujo, impecable.
EliminarOjalá pueda pillar un Minichamps y hasta la versión Crosswagon que se me escapó por poco! También tengo el GTA de M4 y me gusta mucho, pero no me llena del todo.
Abrazos!!
En lo que a la miniatura se refiere, creo que el hecho de que el 156 fuera un coche con un diseño sencillo y limpio juega a su favor, y creo que por lo menos en las fotos se ve bien. Imagino que el siguiente paso sería el de Minichamps, que por cierto lo he visto en alguna tienda rebajado...
ResponderEliminarA mi el 156 me gustó y me sigue gustando, un tío mío tuvo uno, un JTD de 175 CV y no iba mal pero tenía un sonido furgonetero que era un espanto. Un compañero de residencia universitaria de vez en cuando le virlaba el suyo a su padre, un 2.0 TS de 150 CV que ya era para cosa.
Eso sí, prefiero mil millones mil de veces antes el 155...
Saludos amigo
No lo busco compulsívamente pero si aparece un Minichamps que no me arruíne probablemente lo cazaría.
EliminarPero luego aparece un autobús o camión nacional y lo olvido...
Yo estuve cerca de un 156 nuevo del paquete allá por el 2000, en concreto el 1.6 gasolina, pero con el 146 me pude conformar por que había una buena diferencia de precio.
Yo prefiero el 156 antes que el 155, sobre todo el GTA. Con ese me divertí mucho en el circuito de Jerez.
Habría que ver el 155 Q4 cómo queda con respecto al GTA, pero son casi 60 CVs menos. Te lo regalo... Aparte el interior del GTA es una pasada.
Saludos!!
P.d. Es que no puedo con el diseño del 155, parece un diseño hecho por un fabricante de tetra briks. En cuanto al ruído del JTD era sobre todo en frío, luego no sonaba tan mal. Peor era el TDi, el mejor sonido (para mí) era el del motor HDi.
EliminarLa verdad se lo ve bastante tosco sobre todo en el frontal, las ruedas están correctas, quizá un poco gordo el neumático nada más.
ResponderEliminarEs un auto dificil de modelar, recuerdo que Ricko lo intentó a 1:18 y la trompa era aún más deforme, es extraño. Y el Minichamps que tengo hace 20 años tampoco me termina de convencer su frontal, aunque esta a años luz del otro en todo el resto, sobre todo en el interior. Esa trompa es todo un desafío, quizá hoy con otras tecnologías de modelado lograrían plasmarla correctamente.
Dicho esto, si vas a por el Minichamps ten mucho cuidado ya que el mío sufrió no sé si la peste del zamak porque aún no se deformó, pero su otrora hermosa pintura nuvola pasó a ser "burbujola", te diría que si lo compras por internet que pidas fotos detalladas de todos los paños, porque cuando estos modelos salen mal generalmente la partida completa está infectada, ha pasado con otros Minichamps como ser el Mercedes 450SLC.
Saludos!
Parece que los diseños tan limpios y fluidos son los más trabajosos para replicar bien... sobre todo en pequeñas escalas.
EliminarMe recordaste Ricko, tuve algún que otro modelo a 1:18 y me encantaban, recibían hasta acabados interiores con flock... en esa época y viniendo de Burago esos detalles me volaban la cabeza!
Recordaré lo del Minichamps, pero no creo que lo consiga nunca, antes hay muchos que deseo tener.
Abrazos!
Un auto de Walter Da silva que hizo cosas chulas en Alfa antes de ser fichado por Audi.
ResponderEliminarPara ser un cuatro puertas la linea transmitía bastante deportividad y dinamismo. Para mi ni Nuvola ni leches, ajaja un verdadero Alfa tiene que ser en rojo. Siento que la miniatura no este a la altura.
Un saludo
Dale una oportunidad al Nuvola!
ResponderEliminarRojo siempre está chulo, pero el problema que tenemos por aqui en el sur es que el sol se lo come. Por eso mejor escoge rojo burdeos metalizado...
Grande el 156, pero el 159 también estuvo muy chulo.
Saludos.