El Maybach SW38 fue un automóvil de gran lujo producido en Alemania entre 1936 y 1939, con carrocerías tipo sedán convertible de cuatro puertas o "roadster" de dos. Aunque fue el modelo más popular de Maybach de antes de la Segunda Guerra Mundial tan solo se llegaron a construir 520 unidades, sobreviviendo actualmente 152; algunos de ellos pueden verse en museos privados como el de Sinsheim en Alemania o en concursos de elegancia como el de Peeble Beach, donde ganó en 1997.
El talento del ingeniero Karl Maybach era tan grande que antes de la Primera Guerra Mundial ya había desarrollado y perfeccionado motores de avión mientras trabajaba en su original proyecto de un propulsor destinado a los dirigibles Zeppelin. No obstante, sus producciones eran costosas y complejas por lo que no encontraba un mercado suficientemente rentable para sus creaciones.
Decidiendo enfocarse en los automóviles, en 1921 presentó su primer automóvil, el modelo W3, a los que posteriormente se unirían los famosos V12 DS7 y DS8 a principios de los años 30 del siglo pasado. Eran coches grandes y elegantes que requerían chófer, pero con el deseo de ampliar la gama y hacerla algo más accesible Maybach presentó el SW35, posteriormente perfeccionado por el SW38.
Este automóvil se podía escoger con tres motores de gasolina y con cubicajes de 3.5, 3.8 y 4.2 litros, con arquitectura de seis cilindros en línea y árbol de levas en cabeza. Su bastidor estaba formado por un par de resistentes largueros en una estructura con forma de caja, las suspensiones estaban constituidas por ballestas transversales en posición elevada y sus extremos se apoyaban en muelles helicoidales.
Maybach adoptó para ellos unas carrocerías suministradas por los mejores talleres de la época, como el de Hermann Spohn de Ravensburg (en el caso del "roadster"), el de Josef Neus o Erdmann & Rossi de Berlín o Glaser en Dresde, no obstante también se realizaron creaciones experimentales especiales de líneas aerodinámicas por parte de Paul Jaray,
La clientela se mostró encantada con estos ágiles vehículos (a pesar de un peso superior a veces a las dos toneladas) capaces de alcanzar velocidades muy altas para la época, de unos 140 Km/h. Sin embargo la Segunda Guerra Mundial y su economía de guerra hizo que terminase la "vía civil" de Maybach hasta después del conflicto, especializándose entonces en la construcción de propulsores diesel. No sería hasta años después cuando la marca, propiedad de Daimler Benz desde 1966, renacería con el fin de tratar de resucitar el espíritu de construcción de automóviles de super lujo alemanes.
Hoy nos toca retroceder muchos años en el pasado y presentar el rescate del SW38 en versión sedán convertible efectuado por Signature Models, junto con la variante "roadster" que veremos en un futuro. Ambos modelos existen también con varios colores y en escalas mayores (1:18), con un aceptable aspecto general aunque me hayan dejado un sabor agridulce...
No sé qué es lo que habrá pasado en las instalaciones del fabricante de la marca china, pero en esta ocasión mi SW38 cabrio se presenta menos fino y con detalles más bastos que los otros modelos que analicé anteriormente; a ello uno la impresión de que está fuera de escala y la visión de ciertos fallos de calidad, visibles en la pintura del capó, en esos faros horribles o en los penosos cromados de los paragolpes y otros elementos. Aunque hay destellos de buena voluntad, como en el caso del interior o la parrilla de fotograbado, la impresión general es algo pobre y una pista de ello puede ser lo poco que pagué por estos modelos, confiado por el entusiasmo que tenía por las réplicas anteriores.
Al menos se puede decir que en la vitrina son muy resultones y bonitos, que la presentación es de verdadero lujo (ni Minichamps los saca así) y que se presentan en otros colores que, visto lo visto, parecen tener un atractivo superior.
Coincido que no se ve tan fino, analizando las fotos, me animo a decir que gran parte del asunto son los plásticos cromados, demasiado bastos. Hay que considerar que es un modelo clásico y que para dar en la escala, los paragolpes deberían ser verdaderas filigranas de fotograbado. Vale el comentario para los cosos del parante trasero y los picaportes.
ResponderEliminarHay algún detalle metálico tampografiado (la bagueta lateral y el embellecedor sobre el baúl) que también se se ve excedido, pero el cromado es así (o al menos, lo era hasta hace un tiempo), y prefiero el brillo del cromo y no una tampografía en color aluminio.
Es el precio a pagar para estos modelos tan complejos. Hablando de precio, seguramente alguna marca premium lo pueda hacer mejor, pero el precio va a octuplicarse, y no creo que sea ocho veces mejor.
Dejalo en la vitrina, que queda lindo.
Son muy desiguales por lo que veo, pero al menos son honrados y cobran estos modelos más o menos a precio de coleccionable. Y solo la caja-urna ya vale un dinero, hasta placa de metal incluyen.
EliminarY no sé por qué ese desvarío, un ejemplo lo tienes en las ruedas de recambio laterales, si te fijas son de goma natural y están hechas con un relieve impresionante, pues dime por qué meten esas horribles de plástico para el resto del coche.
Luego lo que dices de la versión premium y su precio es tal cual, quizás las personas no entrenadas "entren por el aro" con el Signature pero nosotros somos más zorritos...
Estos muchachos de Signature tienen buena voluntad, a veces con mejores resultados, otras no tanto. El esfuerzo puesto en piezas cromadas insertadas, por intenciones, debería dar muy buenos frutos, pero, en algunos casos (pienso igual que el Gaucho) se les va un poco la mano con el grosor de las piezas, que, igualmente, manifiestan mejores intenciones que una tampografía en aluminio.
ResponderEliminarEsa parrilla fotograbada, por el contrario, muestra lo mas delicado que un fabricante pueda hacer.
Obviamente, la época, mostraba todo el poderío que los alemanes podían ofrecer, tremendos botes con motores potentes, grandes lujos y deslumbrantes prestaciones, toda una tentación para el modelismo.
No deja de ser una miniatura llamativa, con un buen promedio, que cualquiera quisiera incorporar.
Un gran abrazo
Luis
Es lo primero que noté en las imágenes del modelo en la tienda online, me refiero al grosor de los cromados. Tampoco me hizo chiste lo de los faros. Y apuesto a que no está en escala tampoco. Pero ciertamente quedan muy bonitos en la vitrina, esa es una virtud que suelen tener los coches de esa época.
EliminarY luego los ves en museos y te caes de espaldas, no se puede creer tanta belleza! Se nota, literalmente, que cada pieza y cada tornillo está hecho a mano y eso es fascinante.
Abrazos y gracias por escribir!!
Me quedo con este..
ResponderEliminarEn color negro y de cuatro puertas.
Si el cabriolet de 2 es elegante, este es mi yate.
Yo no le veo tan mal a la miniatura salvo por los para golpes un poco sobredimensionados.
Saludos!!
Éste es para más "señor"! De motor, creo que llevaban el mismo.
EliminarCreo que te gustó más esta miniatura que a mi...
Saludos!