El Saab 99 fue un turismo familiar grande con carrocerías tipo coupé de dos puertas y sedán de cinco con corte "hatchback" fabricado en Suecia entre 1968 y 1984. El antecesor directo de los modelos 90 y 900 también llegó a fabricarse en Finlandia y Bélgica, logrando un gran éxito para la marca sueca al venderse en una cantidad cercana a las 600.000 unidades.
El desarrollo del modelo comenzó en 1965 con el objetivo de producir un vehículo más grande y moderno que el Saab 96 encargando su diseño a Sixten Sason, empleado de la firma escandinava fallecido en 1967. El 99 se creó desde cero e incorporó por vez primera algunas de las señas de identidad de Saab como la llave de contacto situada junto al freno de mano, los paragolpes de impacto o el necesario bloqueo de la palanca en marcha atrás al quitar la llave; esto por contra facilitaba el robo.
Inicialmente contaba con un motor Triumph 1.8 a gasolina con cuatro cilindros en línea y 80 CVs si se alimentaba por carburador, posteriormente con la inyección se llegó a los 87. El motor estaba situado delante de forma longitudinal con la caja de cambios antes del eje y orientado hacia atrás, una configuración usada por bastantes años en algunos modelos de Renault o Citroën. Aunque se podría pensar que este montaje dificultaría el cambio de embrague, en la práctica no era tan complicado.
Precisamente el motor fue un asunto delicado al principio de la historia del Saab 99 por sus problemas de filtración en la culata (muy complicada de cambiar) aunque, si no se presentaban, a la larga era un propulsor muy fiable. No obstante con la entrada de Scania en 1972 se tuvo acceso a unos motores nuevos de desarrollo propio, eliminándose los de procedencia inglesa y con ello los inconvenientes.
Estas nuevas motorizaciones incluyeron un 1.9 con posibilidad de inyección y potencias de entre 88 y 97 CVs o bien un dos litros con diferentes variantes según incluyesen simple o doble carburador, inyección o turbocompresor, partiendo de los 95 CVs hasta los 145 de la versión deportiva Turbo 3D de 1978. También existió en Finlandia una versión "Petro" que funcionaba con queroseno ruso y arrancaba por gasolina, por lo que tenía doble tapón de llenado. Igualmente se podía hacer funcionar con aceite de pino (muy disponible en Finlandia), una característica que también incorporaba el Talbot Horizon.
Por otra parte se puso un cuidado especial con todo lo referente a la seguridad, por lo que en el modelo aparecieron soluciones innovadoras en aquel entonces. Por ejemplo, el motor reposaba sobre unas piezas que en caso de impacto frontal se partían, para que no se introdujese en el habitáculo; el capó tenía un punto blando en el centro para que doblase por ahí, las barras de refuerzo en las puertas e incluso un marco de parabrisas reforzado que hacía que en caso de vuelco el techo no cediese.
De entre todas las versiones disponibles hoy comentaremos la EMS (de "Electronic Manual Special"), aparecida en 1973. Este modelo contaba con un motor de dos litros con inyección electrónica y una potencia de 110 CVs insertado en la carrocería coupé. Disponía de suspensión reforzada y pintura metalizada (de color cobre solamente en el inicio), llantas de aleación, un interior más elegante con reposabrazos trasero, volante de cuero, cuentarrevoluciones y parrilla de plástico negro; posteriormente recibiría una dirección más directa, spoiler delantero y neumáticos de perfil bajo.
Otras características incluyeron la caja de cambios manual de cuatro velocidades o automática de tres, suspensión delantera independiente y trasera rígida Panhard, la dirección de cremallera, frenos de disco, emblemas especiales decorativos, asientos calefactados y asientos con reposacabezas integrados; las prestaciones eran de 175 Km/h como máxima velocidad y los 11,5 segundos para hacer el 0 a 100.
Como curiosidad, sobre una versión EMS se creó un deportivo de competición con más de 200 CVs utilizada por el legendario piloto de rallyes Stig Blomquist, llegando a vencer en algunas pruebas. Otros usuarios ilustres del 99 fueron el príncipe sueco Bertil (tío del actual rey de Suecia) o el presidente de Finlandia, Urho Kekkonen. Éste dignatario usó una versión alargada ofrecida por su amigo el magnate Marcus Wallenberg Jr, quien estimó que debía abandonar su ostentoso Cadillac para no distinguirse demasiado sobre el pueblo...
No pude resistirme a la posibilidad de contar en mi colección de miniaturas con un deportivo tan atractivo como este Saab 99 EMS en "silver spoke", realizado con la calidad y finura habituales de los IXO "pata negra". Por ello, y previo pago de unos 25 euros, nos haremos con una réplica dotado con un molde excelente y muy bien pintado, con una serie de detalles de categoría (como sus finos limpiaparabrisas, esas ruedas tan buenas o incluso las faldillas guardabarros) rematados por un interior sobresaliente en el que se puede observar la tapicería en color burdeos o un completo salpicadero. Por otro lado creo que es una novedad en el catálogo de la marca china pues no lo había visto anteriormente, imagino que ahora que tienen el molde no tardarán en sacar la versión Turbo.
Me pregunto qué motivó a SAAB para buscar tanto la seguridad en sus autos. No creo que haya sido por marketing, en ese tiempo no se hablaba tanto del tema. No creo que los suecos manejaran tan mal como para que debieran recurrir a la seguridad, más bien pienso en el hielo y la mayor probabilidad de accidente.
ResponderEliminarHabrá sido así?
Hablando de diecast, es un modelo hecho para que el fabricante se luzca, o se ensarte.
Tiene mucho detalle, tampografía e insertos, y afortunadamente, el esmero de Ixo sirvió para quedar bien parado.
Coincido con las escobillas y el interior.
Todas las marcas suecas inciden en lo mismo, fue un argumento de ventas excelente que también aplicaron a la venta de vehículos industriales (y lo puedo ver en el camión que llevo actualmente). Pienso que en esos países, de corte muy social, piensan que la vida humana vale mucho y debe ser protegida a toda costa, es algo que también se pudo ver en los coches alemanes ya desde los años 50, con su pruebas de "crash test" y demás. Esa misma preocupación lo pasan a otros ámbitos de la vida, si vas a Alemania, por ejemplo, verás normas de seguridad y comportamiento hasta en la sopa y yo mismo las he padecido, a tal punto que si no llevas un material para asegurar la carga que no les guste te vas de vacío.
EliminarEs mentalidad reflejada en normas DIN...
La miniatura me gustó tanto que me fue imposible no comprarla, no es barata pero cuando la recibí consideré que fue un dinero muy bien gastado; me encantó más que muchos Minichamps que tengo. Aparte SAAB me encanta, salvo los modelos últimos que hicieron antes de quebrar, una verdadera lástima que desapareciese una firma empeñada en hacer las cosas bien.
Marca curiosa la Svenka, creo que nunca tuvieron visos de normalidad. Ya, desde el principio, del equipo de diseño de su primer auto, uno solo sabía conducir, como si fuera poco, en un entorno difícil para dicha tarea. Luego, modelo a modelo, siempre fueron distintos (belleza exótica, que le dicen), lamentablemente, la gestión GM los llevó al muere (no se que hubiera pasado con otra administración, pero la de los yanquis fué letal)
ResponderEliminarNo se si el modelo en si me resulta lindo, pero el trabajo hecho en la miniatura es fenomenal, cantidad y calidad de accesorios, precisión de montaje, finura de pintado, etc, realmente, un lujo. Un detalle que se les pasó (viendo todo lo demás) creo que le pudieron haber aplicado una tampografía en las ruedas en esa especie de círculo interno que tiene y que termina de dibujar las formas geométricas de las mismas, como siempre, sería hilar muy fino. Por el resto, magnífica miniatura
Un abrazo
Luis
Si, desde luego era una marca con personalidad salvo los últimos coches que hicieron, cuando lo de GM, si bien el 93 Aero me encanta por lo brutal que es y por su línea.
EliminarIncluso dan bien en cine, recuerdo SAAB en "Peor Imposible" con Jack Nicholson o en la reciente "Drive my car", de Japón. Lástima que la marca se fue al recuerdo...
La miniatura es una "pasada", en mano es excelente y tan solo la pintura (que es buena) no está a la altura de las que emplea Ebbro, por ejemplo. Sin embargo el precio de estos IXO de caja negra no es tan alto, si se busca bien.
Abrazos!