El Garaje Algabeño

El Garaje Algabeño
Pegaso Z 207 "Barajas" de IXO/Salvat (c) 2025 Antonio Sivianes Gaviño

lunes, 18 de agosto de 2025

Renault 4 TL "Iguana Kit Car" de IXO/Hachette

 

Pertenece a la colección francesa de kiosko "Passion Renault 4" de la ed. Hachette.

La empresa española Iguana Kits es un fabricante de carrocerías en fibra de vidrio y resina establecida en Valencia por Santiago Hernández.  Fundamentalmente trabajan con la base del clásico Renault 4, modelo para el que produjeron kits de montaje para transformarlo en pickup, cabriolet y berlina siempre con una estética entre retro, aventurera y surfera.

El amor de Santiago por el Renault 4 viene de lejos, en concreto desde 1982 cuando tuvo que trabajar con él durante su servicio militar. Muchos años después, en concreto 1998, Santiago creó su empresa de transformados y restauración de clásicos pero también decidió desarrollar unos kits de personalización sobre todo para el Renault 4, aunque también aceptan pickups Nissan Patrol eventualmente.

La firma valenciana acepta que el cliente le traiga un vehículo propio pero también se pone en disposición de buscar un ejemplar en buen estado si es preciso y montarle el kit, aunque es posible la distribución para ser instalado por un taller independiente. Facilitan las instrucciones y el proyecto de homologación para poder pasar la ITV nacional sin problemas; el precio de estos kits oscilan entre los 2.500 y 3.500 euros pero con el coche listo para circular y homologado se debe abonar unos 12.000.

Las modificaciones incluyen neumáticos de mayor tamaño, llantas cromadas, pintura especial, suspensiones elevadas, luces adicionales y una carrocería lógicamente reforzada. La mecánica no se altera, por lo que se sigue contando con el motor de 38 CVs del TL y la caja de cambios manual de cuatro velocidades. Así se llega a conseguir un aspecto de estética aventurera con un punto de simpatía que enamora a todo el que lo ve, o como mínimo lo sorprende.


















Hoy presento algo especial, con mucho carácter playero y bastante adecuado para la época veraniega en la que estamos. Se trata de un Renault 4 tan especial que apenas se pueda adivinar lo que hay debajo, tan disimulado en un aspecto mucho más macizo y con una estética bastante deudora de los años 40. El resultado de la miniatura es algo desconcertante y efectivo, no me atrevo a decir si es bonita o no pero desde luego original lo es y por los cuatro costados. En cuanto a la realización, la réplica es destacable sin sorprender mucho ya que la colección de Hachette se distinguió por la calidad de sus modelos y su finura: lo malo es que no hay manera de apreciar el interior pero lo positivo fue la aplicación de la pintura, las llantas y el molde. Además, y si nos gusta, se puede encontrar en un precio muy asequible.














6 comentarios:

  1. A golpe de vista, se ve como un Chrysler PT Cruiser.
    Como bien dijiste, es una curiosidad y cualquier observación deja de ser importante.
    Tiene pocos insertos pero bien puestos, algún desajuste en los transparentes pero seguramente en la mano pasan desapercibidos.
    Mi ángulo favorito es el trasero, que muestra la amalgama del formato original con los postizos que de los guardabarros traseros, además de los insertos de luces traseras, patente y manija de puerta (me pregunto si no habrá tenido paragolpes trasero).
    Rara avis!

    offtopic: Hace casi cuarenta años, estuve noviando con una joven (yo también era joven) que tenía un Renault R4. Corría el año 1985 y el R4 era nuevo. Fue uno de los primeros autos que manejé y puedo asegurar que disfruté mucho el manejo, como años después manejé mi 3CV. Aún recuerdo el vértigo de doblar una esquina a 40 sin siquiera pensar en pisar el freno.
    Me hubiera gustado tener un engendro como éste, para salir a devorar kilómetros con una novia al lado, con una mano en el volante y la otra en la mano de ella (ya dije que yo era joven).

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Seguramente se apuntaron a la moda "neo retro" de esos años, por lo que tendría su sentido. La falta del paragolpes trasero es aposta, pero me pregunto cómo se lo tomarían los chicos de la ITV por más que les lleves la homologación escrita.

      Me alegro de tus andanzas juveniles en coche, yo empecé a conducir muy tarde (con 24) y para entonces me di cuenta que era una de las cosas que más me gusta en la vida y por ello decidí a hacerlo mi profesión, aunque si llego a saber cómo era el tema me lo hubiese pensado más!

      p.d. mi primer coche, de prestado, fue un Kadett S que iba muy bien, el primero propio un Renault Clio diesel de los primeros pero comprado de segunda mano y el siguiente mi añorado Alfa Romeo 146 a gasolina, éste sacado nuevo del concesionario.

      Eliminar
    2. Yo empecé a manejar a los 14 o 15 pero obviamente, no era mi auto.
      Y también adoro sentarme al volante y ver pasar los kilómetros, pero no sé si podría hacerlo como trabajo.
      El trabajo implica compromisos de tiempo, ganas, formulismos y obligación, que no van con mi carácter ni mi idea de libertad.
      Si fuera lindo, no tendrían que pagarte para que lo trabajes.

      Eliminar
    3. Solo te digo que cuando estoy una semana sin tocar el camión tengo unas ganas terribles de tomar el volante.

      Para mí es lo más lindo del mundo, ver un atardecer en la Toscana, pasar las autobahn periféricas de Stuttgart a las tres de la mañana escuchando rock a toda leche, dormir bajo la lluvia en un pueblecito de Bélgica o andar en medio de una nevada durante la madrugada en Holanda.

      Pagaría yo en muchas ocasiones... Pero no se lo digas a nadie.

      Lo que no soportaría es un trabajo de 9 a 5 aguantando un jefe y haciendo tareas repetitivas y sin interés!

      Eliminar
  2. En cuanto a tu última afirmación, diría que me encuentro en el lado de los "....o como mínimo, los sorprende", un injerto, a mi gusto, casi que bizarro, me hace acordar a algunos aparatos yanquis con reminiscencias de.....(hay varios para jugar)
    La miniatura transmite la misma rareza que el original, esas formas exóticas, mezcladas con el formal desparpajo del R4, las aberturas del frente (no se si habrá sido tan fácil lograrlas), probablemente, a título de la miniatura, esté sobrando el paragolpes frontal (entiendo que fué un requisito de circulación), bien el color, especialmente con el simil madera, y demás accesorios que, al menos en fotos, se ven adecuados.
    No sería una miniatura que me esfuerce en buscar, no por la calidad de la misma, sino por lo, a mi gusto, demasiado excéntrico del modelo, aunque, sin duda, es una pieza muy original
    Un gran abrazo
    Luis

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo no soy nada del rollo "hippy" y menos surfero (no sé nadar), pero como lo mío son las miniaturas lo que te puedo decir es que esta colección sobre el universo R4 fue magnífica, con moldes de bastante calidad (son de UH) y con modelos que tienen mucha originalidad, hasta algunos de ellos representan historias propias de gente real.

      Mi interés fue sobre todo por ser una creación nacional, aunque muy modesta, y aparte estas miniaturas salen muy bien de precio por lo que ofrecen.

      Y a veces no está tan mal salirse de la norma!

      Abrazos!

      Eliminar

Siéntete libre de reflejar lo que piensas sobre esta entrada!