Presentado en el salón de Turín celebrado en 1963, el Mistral es el sustituto del modelo 3500 GT del constructor italiano Maserati. Su nombre es homónimo del viento frío que sopla en la Francia meridional y fue sugerencia de un importador galo de la marca del tridente, no siendo la última ocasión en que un modelo de esta marca llevase el nombre de un viento.
El diseño de este vehículo fue obra de Pietro Frua, quien concibió una estilizada carrocería con cúpula para el modelo coupé y una variante descapotable Spider mucho menos difundida, no produciéndose ni mil unidades entre las dos hasta la "muerte" comercial del modelo en 1970.
En el apartado mecánico, lo más destacable fue el hecho de incluir un motor de seis cilindros en línea biárbol que derivaba directamente del que montó el F1 250 de Fangio, con el que se había proclamado campeón del mundo en el 57. Este motor llevaba cámaras de combustión hemisféricas y, sobre todo, un sistema de inyección indirecta Lucas (lo que fue entonces una primicia en un deportivo italiano). De todas formas (y sobre todo en EE.UU) los propietarios solían cambiar el sistema de inyección por carburadores Weber, pues encontraban que el sistema de origen era complicado de regular. La cilindrada del motor inicial fue de 3.5 litros (235 CVs), aunque pronto fue escalando a los 3.7 (con diez caballos más) hasta llegar a los cuatro litros, rindiendo entonces 255 CVs. La caja de cambios, por su parte, siempre fue una ZF de cinco velocidades.
El motor del Mistral fue el último con arquitectura de seis cilindros en línea que se montó en un Maserati, pero a parte de este hecho lo que quedó del modelo en la pequeña historia fue su belleza, haciendo que muchos considerasen al Mistral como el más bello coupé de la casa italiana. Sin duda ésto fue lo que hizo que la firma AC Cars se inspirase para construir el AC Frua (diseñado en el taller del mismo carrocero turinés), aunque ese deportivo fuera más potente y grande... y parte de otra historia que espero poder contar más adelante.
Pasamos ahora al comentario de la miniatura, teniendo primero en mente que forma parte de un coleccionable polaco (del cual desconozco su temática). Estos modelos son comercializados por la editorial española Planeta DeAgostini najo la marca AMERCOM, utilizando moldes de otros conocidos fabricantes como IXO (como sospecho que es en este caso) o Starline, aunque en el modelo de hoy no aparece en la base ninguna inscripción. Como es sabido estas miniaturas son de bajo coste y cuentan con una calidad más bien escasa, como es patente al ver ciertos fallos de pintura y ese horrible intento de representar unas llantas de radios "Borrani". Hereda también del IXO el enorme parabrisas y un molde que no está del todo mal, elevando la nota el interior y la parte trasera con unos grupos ópticos correctos. En la base vemos ciertos detalles y destaco, por negativo, el color escogido ya que este coche "gana" mucho en colores claros (esto es una opinión subjetiva). Sinceramente, si el modelo es muy del agrado del lector le recomiendo que escoja otras alternativas, pero el resto creo que lo considerará como un modelo "del montón" aunque lo cierto es que tiene un punto de belleza.
El motor del Mistral fue el último con arquitectura de seis cilindros en línea que se montó en un Maserati, pero a parte de este hecho lo que quedó del modelo en la pequeña historia fue su belleza, haciendo que muchos considerasen al Mistral como el más bello coupé de la casa italiana. Sin duda ésto fue lo que hizo que la firma AC Cars se inspirase para construir el AC Frua (diseñado en el taller del mismo carrocero turinés), aunque ese deportivo fuera más potente y grande... y parte de otra historia que espero poder contar más adelante.
Pasamos ahora al comentario de la miniatura, teniendo primero en mente que forma parte de un coleccionable polaco (del cual desconozco su temática). Estos modelos son comercializados por la editorial española Planeta DeAgostini najo la marca AMERCOM, utilizando moldes de otros conocidos fabricantes como IXO (como sospecho que es en este caso) o Starline, aunque en el modelo de hoy no aparece en la base ninguna inscripción. Como es sabido estas miniaturas son de bajo coste y cuentan con una calidad más bien escasa, como es patente al ver ciertos fallos de pintura y ese horrible intento de representar unas llantas de radios "Borrani". Hereda también del IXO el enorme parabrisas y un molde que no está del todo mal, elevando la nota el interior y la parte trasera con unos grupos ópticos correctos. En la base vemos ciertos detalles y destaco, por negativo, el color escogido ya que este coche "gana" mucho en colores claros (esto es una opinión subjetiva). Sinceramente, si el modelo es muy del agrado del lector le recomiendo que escoja otras alternativas, pero el resto creo que lo considerará como un modelo "del montón" aunque lo cierto es que tiene un punto de belleza.