El Garaje Algabeño

El Garaje Algabeño
Volvo 164 E de IXO Models (c) 2024 Antonio Sivianes Gaviño

domingo, 29 de noviembre de 2015

Mercedes Benz 300 SC (W188) de IXO/Altaya



Pertenece a la colección temática de kiosko "La leyenda Mercedes Benz", de la Ed. Altaya.


Los 300 S son derivados con carrocerías coupé y descapotable de las berlinas serie 300 e internamente denominados por Mercedes Benz como Tipo W188. Fueron presentados en París en el año 1951 y con el tiempo han devenido en ser modelos más raros que el mismísimo 300 SL, ya que solamente se llegaron a producir 760 unidades siendo los vehículos más caros de todo el catálogo del fabricante.

Aunque existió una serie 300 S, nos detendremos especialmente en la posterior 300 SC, una revisión a fondo de los modelos precedentes. Esta serie fue presentada en 1955 e incorporó como novedad principal la inyección en sus motores, según indicaba con grandes letras en los parachoques de la parte trasera. Este nuevo motor de seis cilindros y tres litros de cubicaje no llevaba los tres carburadores del modelo 300 S y producía 25 CVs más que aquel, pasando de los 150 a los 175. En lo demás era igual, con el mismo par motor, la misma caja de cambios de cuatro velocidades y las mismas dimensiones externas pero ahora el consumo era algo menor y sus prestaciones mayores (180 Km/h de velocidad máxima y aceleración de 0 a 100 Km/h en 14 segundos). El peso se incrementó en 40 kilogramos y las carrocerías eran las mismas que las de la generación anterior: coupé, roadster y cabriolet, en algunos casos "vestidos" por Pininfarina.

























Tenemos otra bonita miniatura de la veterana colección de Mercedes que puso en nuestros kioskos Altaya. En este caso la reproducción de un precioso roadster de colores muy clásicos que seguramente algún famoso actor o actriz de la época poseyó. Esta colección de Altaya tuvo muy buenas miniaturas que ahora se pueden encontrar a precios irrisorios, por lo que pueden ser un buen comienzo para una colección de "diecast" e incluso constituyen bonitos objetos de adorno por sí mismos. En este caso la miniatura convence por su acabado en la pintura y su interior, con un exterior abundante en cromados y una capota plegada muy realista. Solo falla un poquito en el realismo de los paragolpes y faros delanteros, pero se le puede perdonar tranquilamente visto el precio.



















jueves, 26 de noviembre de 2015

Nissan GT-R (R35) de Fujimi






El GT-R se dio a conocer en el Tokio Motor Show de 2007 sucediendo al anterior modelo, de corte más clásico y que también se había hecho un nombre en el mundo de los automóviles deportivos de altas prestaciones "más o menos" asequibles. El nuevo modelo era un coupé de imponente figura maciza diseñado por Shiro Nakamura y fabricado en la planta de Tochigi en Japón, para cuatro plazas y como características principales la tracción integral y su motor 3.8 biturbo con seis cilindros. Primeramente fue lanzado para Japón en diciembre de 2007, al año siguiente en Estados Unidos y Canadá y para Europa en 2009 debido a que Nissan debía preparar centros de asistencia especiales para atender debidamente al vehículo.

El diseño de Nakamura buscaba apartarse de influencias europeas y ser más fiel a la cultura japonesa, por lo que fue comparado con los robots gigantes del cómic japonés, llegando a recibir el sobrenombre de "Godzilla" por el famoso monstruo de las películas. De todas formas un equipo europeo diseñó el techo y otro norteamericano la trasera y hasta involucraron a Polyphony Digital (los creadores del famoso videojuego "Gran Turismo") para dar vida a la interfaz gráfica del ordenador del GT-R.

El chásis es toda una obra maestra de la ingeniería moderna del procesado de materiales diversos, contando con aluminio y fibra de carbono mientras que su pintado es realmente muy complejo, mediante un proceso de seis etapas con capas transparentes, pintura de doble espesor en superficies críticas y opcionalmente un acabado manual que incluye pulido a mano y tres capas de laca transparente.

El corazón de la "bestia" es un motor VR38DETT con dos turbocompresores paralelos de la firma IHI que producía 485 CVs en los modelos fabricados hasta el 2010 y además respetando la ley de bajas emisiones del Estado de California, la más restrictiva del mundo. La caja de cambios es de doble embrague y transmisión semiautomática con varios modos de cambio. A partir del 2010 la potencia se incrementó hasta los 523 CVs y luego alcanzó los 542 CVs en 2012, especulándose con la posibilidad de la aparición de un modelo híbrido en un futuro próximo.

De todas formas, y afín con la naturaleza deportiva del GT-R, Nissan evolucionó mucho el modelo y lo ofrece con prestaciones mucho más deportivas y pensando en la competición. Así, apareció el Spec V y el NISMO GT-R, con un precio superior al 50% del modelo estándar. Algo que parecía casi imposible de mejorar, ya que el original hace el 0 a 100 en solo 3,2 segundos (ayudado con el "control de lanzamiento") y sobrepasa los 310 Km/h. de velocidad punta. Se nota que fue bastante afinado en circuitos como en el de Nürburgring (con gran polémica en cuanto a sus cifras oficiales de vuelta) pero es capaz de hacerlo tan bien como un Corvette ZR1 e iguala y aun supera a vehículos muchísimo más caros (queda muy parejo al Lamborghini Gallardo, por ejemplo, y supera al BMW M3 o al Audi R8 V10).

 Muchas revistas especializadas lo han probado y quedaron muy sorprendidas de que un vehículo que cuesta tres veces menos que un Ferrari 599 GTB Fiorano casi lo iguale en pestaciones, lo que habla muy bien del gran trabajo de los técnicos de Nissan. Y como sucede con los Skyline o GT-R anteriores, el nuevo modelo se puede tunear fácilmente e incluso algunos fabricantes "hackean" la centralita del motor cargando parámetros de control diferentes a los originales para modificar el rendimiento. También existen muchos elementos mecánicos para modificar la potencia e infinidad de aditamentos técnicos y estéticos para "Godzilla", llegándose a ofrecer "packs" que aumentan el caballaje hasta los 1.600... (AMS Performance Alpha Omega).


















Al fin conseguí una buena reproducción de uno de mis coches preferidos de todos los tiempos y que me compraría sin dudarlo si me tocase la lotería. Un automóvil que siempre que veo por la carretera (en muy escasas ocasiones) me apasiona y llama más la atención que modelos mucho más refinados y caros, un vehículo que les "moja la oreja" a coches de mayor enjundia y todo ello por unos 100.000 euros. Así que a partir de ahora y cuando paso por delante de las vitrinas busco con la mirada al pequeño "Godzilla" rojo y lo admiro, una reproducción de una marca desconocida por mí que no delata tampoco su origen nipón ("Fujimi") y que me deleita con un molde muy bueno y preciso que casi parece de resina (lo será?), con un interior solvente y buenos detalles externos (las llantas son estupendas!). Solamente defrauda un poquito en lo bajos, pero... es un Nissan GT-R...




















lunes, 23 de noviembre de 2015

Monica 560 V8 de IXO/Altaya




Pertenece a la colección francesa de kiosko "Automóviles de Antaño", de la Ed. Altaya.


Monica era el extraño nombre que tenía una empresa francesa que produjo automóviles de gran lujo, aunque solamente por muy poco tiempo (entre 1972 y 1974). Estos automóviles fueron concebidos por el ingeniero Jean Tastevin, quien ya poseía experiencia como dirigente en una empresa especializada en la metalurgia (concretamente en la fabricación y alquiler de vagones cisterna). Siendo un apasionado del mundo del automóvil, Tastevin también esperaba diversificar un poco la producción de su empresa por lo que ideó una lujosa berlina a la que puso el nombre de su mujer, Monique, y comenzó su fabricación en la factoría de Balbigny, especializada en la construcción de material ferroviario.

Para realizar el Monica el ingeniero se rodeó de especialistas de varios países y comenzó, como suele suceder, con la fabricación de un prototipo. Este trabajo estuvo a cargo del corredor Chris Lawrence y para 1968 salió de las puertas del taller Williams & Pritchard un coupé de cuatro puertas con carrocería de aluminio, suspensiones Cantilever y eje trasero articulado. Pero eso no es lo que quería Tastevin, así que pidió ayuda al estilista Tony Rascanu para mejorar el diseño del prototipo hasta lograr una primera serie tras varios años de trabajo (1972), siendo presentado el primer ejemplar en el Salón de París.

La inspiración del Monica estaba clara, se podían encontrar rasgos de Maserati o Jaguar pero a diferencia de éstos la creación de Tastevin poseía cuatro auténticas plazas y un gran maletero. También disfrutaba de un rico equipamiento y de calidad: cierres eléctricos de puertas, tablero de madera y cuero, volante barnizado, relojes Jaeger, asientos de cuero, moqueta de lana de oveja Shetland, elevalunas eléctricos, aire acondicionado y hasta un equipo estéreo con reproductor de cartuchos de ocho pistas...

En cuanto a su "alma" (el motor), inicialmente procedía de Inglaterra y era un V8 de tres litros y medio que producía 240 CVs pero no era muy del agrado de monsieur Tastevin y fue reemplazado en la versión definitiva (presentada en 1973) por un bloque Chrysler originalmente de 5,6 litros y también en arquitectura V8. Como Jean solo quería lo mejor, a su vez este motor fue modificado en los talleres de Balbigny hasta alcanzar los 285 CVs de potencia que permitían a los 1.800 kilos del Monica ser impulsados hasta los 240 Km/h.

Y toda esta historia se acaba justamente con el estallido de la crisis petrolera de 1973 y la subida espectacular del precio de la gasolina que tan alegremente tragaba la creación de Jean (unos 18 litros a los cien kilómetros). Tampoco ayudó en nada el precio exhorbitante del vehículo, a la par de un Rolls Royce, y tras solamente un año en cartel don Jean cerró las líneas de producción tras haberse fabricado 20 unidades y tener que volver a centrarse en lo suyo, que por lo visto eran los trenes. Eso sí, en 1975 un tal Guy Ligier retomó la actividad y aprovechó lo que pudo...

























Así que tengo que presentar ahora la miniatura de un automóvil nacido en un periodo muy difícil en la historia de la automoción y que es prácticamente desconocido aun para el entendido, pero gracias a editoriales como Altaya podemos disfrutar de Monica (ejem) y conocer su agitada historia. Ciertamente el molde es bueno y no hay queja de la pintura, el interior no está nada mal y hasta las ruedas agradan pero el conjunto parece un poco desgarbado (esto no creo que sea culpa de la miniatura después de todo). No obstante, entra en la pseudo-categoría de "Altaya de los buenos" y merece su plaza de garaje en nuestras vitrinas, aparte de representar un trocito de sueño o la historia de un fracaso, según apetezca.
























jueves, 19 de noviembre de 2015

SMART City-Cabrio MkI de Minichamps (Edición Dealer)





El Smart City-Coupé (Fortwo -"Para dos"- a partir de 2004) es un pequeño vehículo urbano de muy reducidas dimensiones fabricado por Daimler AG desde su introducción en 1998. Hasta el año 2014 ha conocido tres generaciones y estuvo disponible con carrocerías cerradas (tipo coupé) o abiertas (cabriolet con parabrisas y sin él), existiendo otros vehículos basados en su concepto y con la misma marca con carrocerías de cuatro puertas y roadster. Este concepto de coche urbanita ha conocido un gran éxito mundial, a pesar de los malos augurios, contándose con una cifra total de ventas de 1,7 millones de unidades en 2015.

El Fortwo se fabrica en Smartville, el nombre de la factoría que se dedica a ensamblarlo en Francia y cuenta con una capacidad de dos ocupantes, estando el acompañante en posición algo más retrasada. La carrocería está montada a base de paneles intercambiables de plástico que se fijan a una célula primaria de acero (el "Tridion"), un portón trasero divisible en dos partes y el motor situado tras él. La caja de cambios Getrag siempre fue manual automatizada en las dos primeras series y sin pedal de embrague.

En cuanto a sus motores, fueron siempre de tres cilindros en la primera generación y contaban con turbocompresión. Éstos no llegaron en ningún caso al litro de cubicaje y se podían elegir en gasolina o diesel (CDi, siendo entonces el coche de producción con el motor diesel más pequeño y menos contaminante del mundo) y sin sobrepasar en ningún caso los 60 CVs de potencia.

Estos cochecitos se producían inicialmente mediante una asociación libre de empresas entre el fabricante suizo de relojes Swatch y la alemana Daimler, pero no pasó mucho tiempo hasta que la suiza se retiró del negocio (se supone que no creía mucho en las posibilidades del coche). Sin embargo, los alemanes siguieron adelante y mediante un posicionamiento "brutal" del producto mediante avanzadas técnicas de márketing lograron imbuir en la mente de los posibles compradores la idea de que se llevaban un vehículo fresco, divertido, muy a la moda y sobre todo práctico (es imbatible en entornos urbanos debido a su tamaño y agilidad). Como es natural, estuvo disponible en infinidad de series y versiones especiales pero básicamente conoció tres acabados: Pure, Pulse y Pasion. Y paralelamente también aparecieron muchos objetos de merchandising alrededor de este simpático vehículo, que también ha recibido elogios desde el mundo del arte: una unidad está expuesta desde el año 2002 nada menos que en el MOMA de Nueva York, en su colección permanente.

























Teniendo de siempre la idea de que este revolucionario vehículo no podía faltar en mi vitrina (y es solo una gota en el inmenso mar de diferentes variaciones y fabricantes en los que podemos encontrarlo), escogí la propuesta de Minichamps por ser el fabricante que quizás haya sabido replicarlo mejor... con el permiso de SCHUCO. En esta ocasión además se presenta en un embalaje muy atractivo y con la sorpresa de incluir en una cajita tres juegos de paneles para cambiarle el color a la miniatura, mediante simple presión de las piezas. Aparte de eso la miniatura está muy conseguida y es bastante fiel al modelo real, cuenta con mucha calidad y un interior excelente. Recomiendo esta versión para aquellos que disfruten con este pequeñín y además es como si se llevasen tres diferentes gracias a la genial idea de los paneles intercambiables.