El compacto deportivo Subaru WRX STI fue presentado en el Salón de Tokio de 2007 siendo basado en el WRX estándar. Esta variante se distinguía por su aspecto ensanchado, modificaciones electrónicas y uso de componentes de aluminio; el modelo inicialmente estuvo disponible con carrocería "hatchback" y posteriormente como sedán de cuatro puertas con muchas versiones especiales, como la "A-Line" destinada sobre todo para el mercado japonés.
El STI japonés disponía de un bloque de dos litros y cuatro cilindros equipado con turbocompresor e intercooler que daba 308 CVs pero las versiones destinadas a la exportación portaban un motor de 2.5 litros y turbo con simple entrada, significando que la potencia y el par motor eran menores (300 CVs). Sí eran idénticos en el aumento de peso con respecto al WRX debido a los refuerzos del chasis, el diferencial trasero y las suspensiones con elementos de aluminio.
En cuanto a las modificaciones electrónicas del vehículo incluyeron un control de estabilidad con varios modos junto con el sistema "SI-Drive" que variaba el comportamiento del vehículo a voluntad. El diferencial central DCCD también era muy sofisticado pues contaba con elementos combinados mecánicos con operación mediante solenoide, permitiendo al conductor cambiar entre un bloqueo de tipo manual a automático; igualmente se podía regular la fuerza de bloqueo mandada a los ejes.
Otras características mecánicas del WRX STI incluyeron la tracción total, la caja de cambios manual de seis relaciones o bien automática de cinco, el mecanismo de sincronización variable de válvulas AVCS que lograba una gran reducción de emisiones de gases contaminantes y las suspensiones tipo McPherson delante y de doble horquilla detrás con barras estabilizadoras en ambos ejes.
En 2010 apareció el sedán al mismo tiempo que la versión hatchback tuvo un restyling que adoptó la parrilla y el parachoques de su hermano. Estuvieron disponibles con el nivel de acabado STI (con motor de dos litros y transmisión manual) o bien con el A-Line, que incluía motor de dos litros y medio y cambio automático. También se le podía añadir a esta terminación el pack Premium con techo corredizo, llantas BBS y asientos de cuero Camel. Pero el cambio verdaderamente importante fue la pérdida de la denominación Impreza, convirtiendo a estos modelos en una línea independiente.
Finalmente hay que añadir que la terminación A-Line solo estuvo disponible en Japón, Australia y para algunos mercados asiáticos como Singapur, Hong-Kong, Tailandia o Indonesia. Esta tirada de vehículos fue de tan solo 400 unidades para Japón, aunque en contrapartida los mercados occidentales tuvieron a menudo sus propias series hasta el final de producción en julio de 2014.
Hoy presento un Impreza que no es Impreza, una de las versiones del mítico automóvil de rallyes que fue perdiendo personalidad hasta que la denominación pasó a ser abandonada, al igual que le ocurrió a su rival el Mitsubishi EVO. La réplica fue elaborada por EBBRO dentro de su línea HOT, que suele tener como temática a vehículos más actuales que los Oldies, pero aunque no se pueda decir que sea una mala miniatura lo cierto es que me decepcionó. Esto me sucedió al observar el poco realismo de la pintura, con ese grano metalizado excesivo (en honor a la verdad en mano no se aprecia apenas) al igual que al apreciar su molde, no tan fino como lo habitual en su fabricante. También hay falta de precisión en algunos detalles externos, todo a tal punto que parece como si este WRX lo hubiese manufacturado J-Collection o NOREV, al menos en alguna de aquellas series no tan logradas que lanzaron.
Por todo ello, y a pesar de sus buenos detalles (como el interior, irreprochable, o los limpiaparabrisas) no puedo recomendar tanto esta miniatura que no justifica su elevado precio. Solamente los fanáticos de los Impreza o los aficionados a los coches japoneses podrían verlo interesante (como fue mi caso); si tenemos que elegir algo del catálogo de EBRO antes hay muchas otras opciones.
El modelo me resulta anodino porque el Subaru original es anodino. Ebbro no tiene la culpa de lo poco brillante que es el original.
ResponderEliminarCoincido que el original tiene varias sorpresas. En principio, el interior, ese tablero tiene más color y detalles que el de mi auto real! Una bestialidad. Las escobillas son perfectas. Las ruedas son otro punto a favor.
Ufff anodino yo no diría que es, con esas llantonas, esa entrada en el capó y el kit aerodinámico no creo que dejase indiferente a mucha gente por la calle, al menos por aquí. El modelo estándar sí es más normalito y ahí sí que no creo que llamase la atención, pero este "bicho" de la foto a más de uno nos palpita el corazón como una papa frita...
EliminarLa miniatura sí es menos espectacular dentro de lo que cabe, pero en general me agrada.
Coincido q, al menos a mi gusto, algunas evoluciones empeoraron estilísticamente, lo que, indudablemdnte, está fuera de dudas, es la calidad de Subaru, tremendos maquinones.
ResponderEliminarLa miniatura tiene altibajos, detalles muy bien logrados, los mencionados interior, limpiaparabrisas, ruedas y gasta los faros se ven bien, pero, tal como mencionás, la percepción de calidad y precisión, no es tan buena como en otros modelos del fabricante.
No sería lo q mas buscaría por gusto personal, (otros Subarus md gustan mas) no veo mala la miniatura, pero uno espera mas de Ebbro.
Un gran abrazo.
Luis
Este bicho es algo serio, guste o no estéticamente tiene mucha "chicha" y debe ser un tiro en las curvas, con toda la carga tecnológica que lleva. Subaru sabe mucho de estas cosas, pero lo que no le puedo perdonar es que haya hecho desaparecer toda la línea Impreza WRX.
EliminarAhora me gustaría conseguir los Impreza de las primeras series, de Almost hay alguno que se ve bien pintón. Lo malo es que ésos andan con precios más altos, pero bueno...
Abrazos!