Opel Astra F Cabrio de IXO/Eaglemoss

Pertenece a la colección alemana "Opel" de kiosko de la ed. Eaglemoss, producido por IXO.

El Astra es el modelo compacto de Opel, vendido en varios países del mundo bajo las marcas Vauxhall, Holden y Chevrolet (todas ellas propiedad de la General Motors). La gama Astra sucede a la anterior Kadett, existiendo hasta la fecha (2013) cuatro generaciones la primera de las cuales aparece en 1991.

Los Astra existen o existieron concarrocerías hatchback de 3 y 5 puertas, sedán de cuatro, familiar de cinco ("Caravan"), coupé y la versión más especial de todas, la descapotable diseñada por Bertone. Tenían en común entre ellos la adopción motores en posición delantera transversal y tracción delantera.

Por ser objeto del análisis de la miniatura, nos detendremos en el comentario de la primera serie que es lanzada en julio de 1991. Las motorizaciones oscilaban entre una potencia de 60 y 150 CVs (el Astra GSi, que vio posteriormente rebajado su caballaje hasta los 136 debido a las nuevas normas Euro II). Los motores diesel eran casi todos de proveniencia Isuzu.

Quizás la versión más llamativa de esta serie fue la "Cabrio", diseñada en Italia por el estilista Bertone. Destinado a sustituir al antiguo Kadett Cabrio, fue lanzado a finales de 1993. Ya sea con la capota puesta o sin ella, este descapotable mantenía una línea elegante y con un gran equilibrio en las proporciones. Era posible adquirirlo con dos motorizaciones: la más potente un dos litros con 115 CVs y otra 1.6 de 75 Cvs, que fueron posteriormente sustituidos (hacia 1995) por mecánicas biárbol con 1.4 y 1.8 litros de cilindrada. Con respecto al peso, el incremento sobre la versión de dos puertas era de unos 140 Kgs. Este modelo fue el último en ser retirado de la serie F (la primera) ya en el año 2000, siendo sustituido por el Astra Cabrio serie G.

En España todas las generaciones del Astra han tenido un notable éxito, peleando en un segmento que es el de mayor cifras de venta en la península (el de los compactos). Prueba del éxito global de esta serie de vehículos la da el hecho de que ya en 2007 se habían sobrepasado los diez millones de ejemplares puestos en circulación por todo el mundo.






























En cuanto a la miniatura, la encuentro como correcta en líneas generales aunque este cabrio siempre me ha parecido un tanto anodino, particularmente no lo considero de lo mejor del estudio Bertone. Si bien es cierto que la miniatura cumple con el objetivo de ser lo más fiel posible al original, dentro del precio de venta tan bajo que tiene, obviamente. Ello se consigue con un aceptable interior, un molde bastante bueno y esta vez sin exceso de pintura aparente. El resto del detallado externo está a buen nivel y forma un conjunto bastante equilibrado.